Los humanos llevamos miles de años evolucionando, pero no nos podemos considerar una especie perfecta. Cientos de mitos y leyendas buscan ir más allá de los límites de la propia naturaleza, y hoy en día pueden hacerse realidad. Pero, ¿Sabes qué es o para qué sirve el biohacking?.
Por primera vez, podemos atisbar un futuro en el que hemos vencido a todas las enfermedades o al envejecimiento gracias a la ayuda de la tecnología. Entonces dejaremos de ser humanos para convertirnos en lo que se conocer como transhumanos.
Esta ciencia busca prescindir del cuerpo y vivir eternamente como datos en una red neurológica, gracias a la Inteligencia Artificial.
Un primer paso para llevarlo a cabo es el biohacking, también conocido como Biología Do It YourSelf. Ésta tiene como objetivo mejorar nuestra condición humana poniendo al alcance de todo el mundo la nanotecnología, la ingeniería genética y los implantes tecnológicos.
Como estamos condicionados por el cine o la literatura, nos vienen a la mente cyborgs comoRobocop o Terminator. Pero, ¿Realmente queremos convertirnos en algo así? Hay gente que sí, como Neil Harbisson, conocido como el primer cyborg de la historia. Fue considerado así debido a la antena que tiene implantada en la cabeza para distinguir los colores a través del sonido.
El biohacking ético defiende estas prácticas siempre que no pongan en peligro nuestra salud, como puede ser el uso de chips bajo la piel para identificarnos o para medir nuestro nivel de azúcar en sangre.
Pero como en todo, esta ciencia también tiene extremistas y se les conoce como grinders. Ellos no tienen problema en poner en peligro su propia vida, con el objetivo de implantarse un chip que mejore sus capacidades, sin esperar a permisos médicos.
Por ejemplo, Rich Lee se implantó unos imanes en el interior de los oídos para emular la capacidad de los murciélagos para ver en la oscuridad. También ha habido otros que se han implantado chips para mejorar la comunicación a través de bluetooth o para identificarse.
En la mayoría de los casos estos implantes se realizan bajo la piel, por lo que no hay riesgos excesivos, salvo el de infección. Sin embargo, otras veces se trata de verdaderos implantes quirúrgicos.
Los biohackers, y más concretamente los grinders, se suelen reunir en redes sociales y foros donde ponen en común experimentos y exploran ideas para llevar a cabo el biohacking. Incluso, existen tiendas online que venden material para llevar a cabo los implantes. Por ejemplo, puedes comprar imanes para colocar bajo la piel por menos de 50 euros.