Gobierno prepara un plan de recambio de celulares que tendrá como objetivo central acelerar la migración de redes 2G y 3G a 4G y que, según se supo en los últimos días, estaría en marcha a partir de junio. La idea es llegar a un acuerdo con las operadoras y los fabricantes de equipos para lanzar al mercado unos dos millones de aparatos económicos, destinados a clientes de la base de la pirámide social. Y otros ocho millones para el segmento medio y medio-alto, cuyo precio estaría más cerca de los de última generación que hay en el mercado, por alrededor de 10 mil pesos.
En vistas que este plan no tardaría demasiado en plasmarse, ON24 consultó a Javier Ojeda, titular de Point, representante de personal en Rosario. “Creo que es una iniciativa atractiva, sobre todo si el gobierno acompaña con financiamiento para dar más accesibilidad a la tecnología”, destacó el empresario; que a pesar de estar en conocimiento del tema, adelantó que aún no se ha suministrado información oficial por parte de las operadoras sobre cómo se llevará adelante.
Asimismo, Ojeda ahondó sobre las condiciones del mercado actual: “Si bien el año pasado el 100 por ciento de lo que se vendió fueron smartphones, todavía hay un parque muy grande de usuarios con tecnologías anteriores”. Según estiman desde el gobierno, cerca de la mitad de las conexiones móviles en Argentina son sobre redes 2G, lo cual limita considerablemente las comunicaciones.
La exigencia del Ministerio de Comunicaciones es que los aparatos que abarque este plan canje sean homologables por las tres operadoras del mercado, una situación que en la actualidad no se da con todos los dispositivos móviles existentes en el mercado, aún cuando existe un cambio de estrategia de las empresas de telefonía de comenzar a vender aparatos liberados, para usar con cualquier línea.
Salto adelante
“Esto va a posibilitar que más gente se pueda conectar a internet, dado que el 2G no permite acceder a estos servicios, como es la navegación, el uso de aplicaciones, de redes sociales o el streaming”, apuntó Ojeda. Y amplió sobre las implicancias del salto tecnológico, “las redes 4G se han concesionado hace poco tiempo, así que todavía habrá que esperar un poco para que funcionen a toda su capacidad. La tecnología LTE va a revolucionar el consumo, y va a traer un gran cambio en la productividad y las comunicaciones”.
Consciente que los aparatos precisan la contraparte de infraestructura, Ojeda confió en que las inversiones sigan su curso, “es muy importante la infraestructura para que los teléfonos anden bien y se puedan apuntalar los servicios”.
¿Qué se vende hoy?
“Hay una buena variedad de teléfonos, la financiación y las promociones son una gran opción. Además, se están vendiendo teléfonos liberados, sin estar asociados a una línea”, apuntó el titular de Point. “Abril es una época un poco recesiva respecto a otros años, que tiene que ver con el momento de la economía. Esperamos que cuando estemos cercanos a la fecha del Día del Padre estemos en mejores condiciones”, completó.