¿Quiénes pueden convertirse en donantes voluntarios habituales? ¿Cuáles son las condiciones?
Por normativa, pueden donar las personas desde los 18 hasta los 65 años como máximo. Hoy en día, con una autorización escrita de los padres, también pueden hacerlo a partir de los 16 años, y luego de los 65, durante dos o tres años más, con un aval médico por ser donante habitual. La persona tiene que tener muy buen estado de salud, en lo posible no padecer ninguna enfermedad, pero hay situaciones que aún tomando algún medicamento o con una situación crónica, si nosotros detectamos que no vamos a generar ningún daño, también puede hacerlo. Para donar se debe pesar 50 kg. o más, esto permite que done poco menos de medio litro y se sienta perfectamente. Eso es lo básico, junto con no haber tenido fiebre los días anteriores y que a la hora de venir esté perfectamente bien.
¿La donación voluntaria cubre el 100 % de lo que se necesita?
Mundialmente no, la directiva de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es tener en 2020, prácticamente el 100 % de donación voluntaria, y no de reposición siempre familiar. Por otro lado, en Argentina, la donación remunerada está prohibida, en Europa directamente no existe esa posibilidad porque hace años que tienen prácticamente el 100 % de donación voluntaria. Allí, ya es una cuestión completamente solidaria e indirecta: una persona dona cuando está bien, elige el mejor momento y sabe que si en el futuro lo necesita, habrá. Es un sistema de retroalimentación, se establece una comunidad solidaria. En cambio, por ejemplo, en Estados Unidos la donación paga se permite, si bien trabajan muchísimo, obviamente, sobre las condiciones para donar. Aquí está prohibido por la legislación, porque si el único móvil es el dinero, en la entrevista mucha gente no diría la verdad y no se garantizaría una donación segura. El lema de la OMS este año es precisamente “La sangre nos conecta a todos”, para reforzar el tema solidario. Reforzar que a través de esa unidad de sangre hay una conexión impresionante, entre quien la da, porque está bien, y entre quien la recibe porque está muy enfermo, es profundo. Y es permanente: cuando todo el mundo está en sus actividades, alguien se está transfundiendo. Nosotros permanentemente necesitamos cumplir esos requerimientos.
¿Qué medidas de seguridad se toman en el Servicio de Medicina Transfusional de Grupo Gamma?
Cuando hablamos de seguridad transfusional, nosotros apuntamos a grandes rasgos a dos columnas principales, una sería el donante como generador de esta “materia prima”, base para luego poder utilizar esos hemocomponentes y darle seguridad al paciente receptor de esas transfusiones, quien constituye la otra columna en seguridad. En el donante, la seguridad empieza por la información y cómo lo seleccionamos, no en el sentido discriminatorio, sino para cuidarla respecto a que tenga una donación segura y sin inconvenientes. De esta manera cuidamos al receptor, respecto a los antecedentes médicos del donante, las posibilidades infectocontagiosas, las cuales estudiamos con métodos totalmente sensibles y de alta calidad. Luego, hacemos el fraccionamiento de las unidades con todas las medidas de asepsia y seguridad, que hoy en día están totalmente normatizadas, contamos con procedimientos estándar de trabajo y utilizamos el hemocomponente necesario en cada paciente. En relación a eso, contamos en el Sanatorio Los Arroyos de Grupo Gamma con el Comité de Transfusiones Intrainstitucional, con más de 11 años de trabajo, en el cual hacemos revisión constante de Guías. Ese trabajo consiste en ver cuál es la transfusión adecuada, cuáles son los parámetros de los pacientes, cómo utilizarlo en el ámbito quirúrgico. Así, buscamos el uso racional, y no liberal, de esta sangre.
- Recomendamos venir bien descansados.
- No venir en ayuno completo, sino tomar algo dulce, pueden ser infusiones dulces, galletitas, tostadas, fruta, y evitar los líquidos y alimentos grasos.
- Traer el documento o una identificación personal, pasaporte, carnet de conducir: es fundamental la identificación formal para la extracción.
Podés leer la primera parte de la entrevista aquí.
Fuente: Dra. Sofía Bonetti, Jefa del Servicio de Medicina Transfusional de Grupo Gamma
