Constituyen la tercera enfermedad crónica entre la población femenina adolescente y juvenil. ¿De qué estamos hablando? ¿Cuáles son sus causas? La Dra. Luciana Spirandelli, integrante del Servicio de Nutrición, esboza las primeras respuestas a estos interrogantes.
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) engloban varias enfermedades crónicas y progresivas. Las mismas son: Anorexia Nerviosa (AN), Bulimia Nerviosa (BN), y el Trastorno Alimentario No Específico (TANE).
En la actualidad, constituyen cuadros de gran relevancia social especialmente en poblaciones de más alto riesgo: mujeres jóvenes y adolescentes de países desarrollados o en vía de desarrollo.
En general, la concepción actual de la patogenia de los TCA es biopsicosocial. Son patologías psiconeuroinmunoendocrinas. Y se caracterizan por:
-la gravedad de la sintomatología asociada,
-elevada resistencia al tratamiento,
-riesgo de recaídas, y
-alto riesgo de comorbilidad o
-presencia de otros trastornos (abuso de drogas, depresión, falta de habilidades sociales, y baja autoestima social y corporal).
En los TCA la relación varón/mujer es 1 sobre 10 a 20. Además, es importante saber que existe comorbilidad (concepto que se refiere a la presencia de uno o más trastornos y el efecto de estas enfermedades adicionales) de TCA con ansiedad/depresión 66%, desorden obsesivo-compulsivo 40%, y abuso de drogas o alcohol 25%.
En el caso de la Anorexia Nerviosa el trastorno es asociado además a un elevado riesgo de mortalidad y reducido porcentaje de recuperación.
Debido a estos factores, entre otros, los TCA constituyen la tercera enfermedad crónica entre la población femenina adolescente y juvenil en las sociedades desarrolladas y occidentalizadas.
Causas
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria son enfermedades complejas y multicausadas. Entre ellas encontramos:
-Cierta predisposición biológica/genética o psicológica. Existe evidencia tanto de genes que confieren mayor susceptibilidad para los TCA, entre otras patologías, así como determinadas características cerebrales o rasgos de personalidad que otorgan riesgo de desarrollar TCA.
-Un determinado clima o una particular dinámica familiar para que se generen. Si bien no hay perfiles fijos, existen rasgos comunes que se repiten en las familias de los pacientes.
-Pero lo que determina la aparición de un TCA en última instancia es la dieta. Siempre se comienza con una dieta ya sea por un sobrepeso real, una obesidad o simplemente un exceso de peso social subjetivo.
Tratamiento
Los TCA deben tratarse en forma interdisciplinaria. Es decir, junto con profesionales del área de la nutrición, psiquiatría, psicología y endocrinología.
El éxito terapéutico dependerá de muchos factores, entre ellos:
-La personalidad del paciente.
-El deseo del cambio.
-La edad de comienzo.
-La duración de la enfermedad.
-La historia familiar.
-La presencia de otros trastornos como Depresión, Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) o de personalidad.
Los TCA representan un singular mecanismo para alcanzar la autonomía y romper con un destino que estaba, por lo menos para la mujer joven, decidido desde su infancia y la sociedad.
Fuente: Spirandelli Luciana María, Nutrición