Por Bonini María Teresa
Diagnóstico por imágenes cardiovasculares
Las cardiopatías congénitas son las malformaciones más frecuentes que se presentan en los recién nacidos.
Desde la década de los 80, con el desarrollo de la ecografía y las mejoras progresivas en este ámbito, se pudo iniciar el estudio del corazón fetal.
Las cardiopatías congénitas son un conjunto de malformaciones cuya repercusión en la vida pre y post natal es muy variable. Las hay de carácter leve, cuya sospecha puede a veces pasar desapercibida, y sabemos que ciertamente no comprometerán la salud ni la vida de nuestro paciente. Existen también las cardiopatías congénitas que llamamos moderadas y especialmente las graves o severas, muchas de ellas sin repercusión durante la vida intrauterina pero que luego del nacimiento y a cuenta de cambios adaptativos de la vida post natal, pueden generar síntomas en el recién nacido, algunos de ellos tan importantes que pueden poner su vida en riesgo.
Un hecho muy importante que se debe mencionar es que la mayor parte de estas malformaciones se presentan en “embarazos normales”, es decir sin ningún antecedente que nos haga pensar en la posibilidad de que pudieran presentarse.
Sólo el 20 % de los recién nacidos con cardiopatías congénitas tienen antecedentes maternos, familiares o fetales que incrementan el riesgo de desarrollar dichas malformaciones.
Para detectarlas contamos con el aporte invalorable de la ecografía prenatal que se realiza como control habitual del embarazo y que permite realizar el screening o pesquisa. Si bien se pueden encontrar algunas diferencias en cuanto al mejor momento para visualizar el corazón fetal, las semanas 20 a 26 son las más aceptadas.
¿Es fácil ver el corazón en la ecografía prenatal?
Ciertamente que no. Es un órgano pequeño, móvil y asimétrico y además el feto también se mueve, pero evaluarlo es una parte importante del estudio ecográfico y si bien a veces circunstancias técnicas no permiten tener imágenes de adecuada calidad para dar toda la información posible, en otras pacientes dicho screening o tamizaje es ampliamente satisfactorio y se puede trasmitir información confiable en relación a la presencia o no de malformaciones cardíacas que deberán ser confirmadas o descartadas a través de un ecocardiograma fetal.
¿Qué es un ecocardiograma doppler fetal?
Es un estudio ecográfico trans abdominal que se realiza a la embarazada que tiene factores de riesgo que incrementan las posibilidades de cardiopatía congénita fetal o a pacientes con sospecha de malformación cardíaca detectada por el ecografista obstétrico.
En general el profesional que la realiza es un cardiólogo pediatra ya que el objetivo es evaluar el corazón fetal, su estructura, funcionalidad y ritmo para confirmar o descartar anormalidades estructurales o funcionales que pudieran comprometer la salud y la vida del niño al momento del nacimiento o aún intraútero.
Si el estudio confirma el diagnóstico de cardiopatía congénita moderada o severa, eso permite advertir a los padres acerca del problema de su hijo/a con el tiempo necesario para elaborar la noticia a nivel familiar y para reflexionar y comprender las conductas a tomar que resultarán necesarias para el futuro bebé.
La experiencia y las estadísticas a nivel mundial demuestran claramente que la sospecha por parte del ecografista obstétrico y la confirmación diagnóstica de las cardiopatías congénitas moderadas y especialmente las severas con un ecocardiograma fetal, permiten tomar conductas médicas apropiadas para poder optimizar el cuidado del embarazo y decidir el lugar de nacimiento, que debe ser el ámbito dónde se realizará la terapéutica al recién nacido.
En el caso de las cardiopatías congénitas, la prevención está en la sospecha y el posterior diagnóstico realizando un ecocardiograma doppler fetal confirmatorio.