Carcinoma de Merkel

Por Savoré, María Alicia
Dermatología

En respuesta al pedido de nuestros pacientes, la Dra. María Alicia Savoré (Jefa del Servicio de Dermatología de Grupo Gamma) nos acerca información sobre este tipo de cáncer de piel el cuál es raro pero muy agresivo y su incidencia se ha triplicado en los últimos 15 años.

El Carcinoma de Merkel, también llamado carcinoma trabecular de la piel, carcinoma neuroendócrino primario de la piel o tumor de Toker, es una neoplasia cutánea muy agresiva, de rápido crecimiento y con gran capacidad de diseminarse a ganglios u órganos distantes. Si bien es raro, su incidencia se ha triplicado en los últimos 15 años.

Aunque su origen es controversial se lo asocia a un virus llamado Poliomavirus de la célula de Merkel.

Dentro de los factores de riesgos, se pueden mencionar:

-Piel clara con grandes exposiciones solares sin protección solar.
-Exposición a luces artificiales como camas solares o PUVA (asociación de metoxaleno oral más radiación ultravioleta A utilizada en el tratamiento de la psoriasis).
-Exposición a luz infrarroja: láser, hornos eléctricos, etc.
-Inmunosupresión: HIV, leucemias, trasplante de órganos, drogas inmunosupresoras, etc.
-Antecedentes de otros tumores.
-Exposición al arsénico por agua de pozo contaminada.

Clínicamente se presenta como una tumoración hemiesférica, cupuliforme o sobreelevada, de color erítematoviolácea, de superficie lisa, indolora, de rápido crecimiento, localizada en zonas fotoexpuestas (cabeza o cuello), y en pacientes mayores de 50 años con ligero predominio en varones.

AEIOU es el acrónimo que define al tumor, donde:

-Asintomático.
-Evolución y rápido crecimiento.
-Inmunosupresión.
-Older, es decir, mayores de 50 años.
-UV es decir expuesto a RUV (radiación ultravioleta).

Dadas las características del tumor (agresividad, rápido crecimiento, diseminación y tendencia a las recidivas) requiere un diagnóstico precoz, tratamiento quirúrgico y radiante para mejorar la sobrevida del paciente.

Por ello es fundamental concurrir al dermatólogo y realizar una consulta por lo menos una vez al año sobre todo si se cuenta con alguna de los factores de riesgo aquí enunciados.

 

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