Ai-Da es una artista que tenía planificada una exposición en Egipto, cerca de las grandes pirámides. Este evento estuvo muy cerca de ser cancelado debido al celo, la incomprensión y la paranoia de las fuerzas policiales de dicho país.
El robot y su creador, Aidan Meller, fueron detenidos durante una semana y media mientras las autoridades buscaban una comprobación de que estaban implicados en una operación de espionaje.
Los problemas comenzaron cuando los guardias de la frontera notaron las cámaras en los ojos del robot y el modem incorporado. Meller señaló que si bien es posible remover el modem, es mucho más complicado quitarle los ojos al robot.
Las cámaras son además muy importantes en las operaciones creativas de Ai-Da.
La liberación llegó justo unas horas antes del comienzo pactado para la exhibición.
El embajador del Reino Unido había estado trabajando para aclarar la situación de Meller y Ai-Da. El evento, conocido como “Por siempre es ahora” cuenta con la participación de artistas egipcios e internacionales de renombre y está auspiciado por Arte de Egipto, el ministerio de antigüedades y turismo y el ministerio de asuntos exteriores.
Es fácil imaginar que las autoridades policiales estaban cada vez más apremiadas al darse cuenta de a cuanta gente estaban molestando y que tarde o temprano deberían admitir que el robot no era un ingenio espía.
Meller declaró: “Es un robot artista, seamos claros sobre esto. No es una espia. La gente le teme a los robots, eso lo entiendo. Pero la situación es irónica porque el objetivo de Ai-Da es resaltar y alertar sobre el abuso del desarrollo tecnológico y ella es detenida por ser tecnología”.
