Airbnb introdujo en su aplicación para Estados Unidos y Canadá una “tecnología antifiesta”, con el objetivo de detectar y bloquear a las personas que intenten utilizar el servicio de alquiler de alojamiento un corto plazo y, entre sus planes no declarados, esté la organización de fiestas.
Este sistema fue probado en octubre del 2021 en varias ciudades de Australia, donde se produjo una caída del 35% en las reservas. Sin embargo, la compañía sigue apostando por contar con la posibilidad de examinar la historia del potencial inquilino, qué tan lejos vive de la casa que quiere alquilar, si alquila por un día laborable o un fin de semana, entre otros factores.
Airbnb ha estado bajo una creciente presión para tomar medidas drásticas contra las fiestas desde 2019, cuando una reunión en una casa durante Halloween en un suburbio de San Francisco terminó con cinco personas muertas en un tiroteo.
Antes de lanzar la nueva herramienta, los propietarios podían optar por autorizar fiestas bajo su propia discreción.
La compañía, que ofrece una plataforma digital dedicada a la oferta de alojamientos mediante la cual los anfitriones pueden publicitar y contratar el arriendo, precisó que, si detecta que alguien intenta hacer una reserva de alto riesgo, la bloqueará.
Esta prueba se basa en la política de Airbnb para usuarios menores de 25 años, que no les permite reservar casas enteras dentro de su área local a menos que ya tengan más de tres reseñas positivas y ninguna negativa.