La Empresa Provincial de la Energía (EPE) de Santa Fe anunció que comprará energía generada de manera renovable para incorporarla a su servicio eléctrico, a través de licitaciones que se lanzarán en abril y se pondrán en marcha en junio próximo.
Fuentes de EPE precisaron que el primer pliego prevé la compra de 20 MW fotovoltaicos, distribuidos en módulos de 5 MW en las regiones santafesinas de San Guillermo, Arrufó, Firmat y San Javier. A su vez, se incorporará la energía generada a través de biomasa, en módulos de 2 a 3 MW, con epicentro en la zona de Villa Guillermina, en un trabajo conjunto desarrollado entre la EPE y especialistas del Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático locales.
En esta primera parte, el proyecto contempla la licitación de energía fotovoltaica, que se obtiene de la luz del solar y se convierte en electricidad de manera totalmente renovable y no contaminante. También comprenderá a la generada por centrales de biomasa, una de las fuentes de energía renovable más confiable producida a partir de materia orgánica.
En una segunda etapa, se licitarán 10 MW eólicos en Rufino y otras localizaciones fotovoltaicas, que serán definidas en base a como avance en forma paralela las gestiones que realiza la mayorista energética Cammesa en torno a las licitaciones actualmente en proceso, como así también de otras iniciativas en las que EPE participa en el marco del esquema de trabajo articulado que mantiene con Enerfe y otros actores de la cadena de valor.
La licitación se lanza con el objetivo de mejorar los niveles de tensión, reducir de las pérdidas de energía del sistema y fomentar la eficiencia energética de toda la provincia.
La iniciativa surge de la aplicación del programa Santa Fe Renovable, un desarrollo conjunto entre el Gobierno de Santa Fe y la EPE, que busca innovar en el servicio eléctrico a partir de la incorporación de energías renovables al sistema interconectado provincial.
El programa promueve el desarrollo sostenible mediante el aprovechamiento de energías limpias: fotovoltaica, eólica y biomasa; y su objetivo principal es potenciar la infraestructura, reducir costos, contribuir a mitigar el cambio climático a partir de la sustitución de combustibles fósiles y desarrollar una innovadora cadena de valor.
El proyecto toma como base la experiencia de Generfe del año 2019, interrumpida en aquel momento por las volatilidades macroeconómicas acaecidas, y lo adapta a las circunstancias actuales.