El coletazo de la pandemia y las restricciones de viajes impulsó un rubro que vive su mejor temporada en años. Estiman que se construirán este verano más del doble de piletas que el año anterior.
En relación al año pasado hay más de un cien por ciento de aumento en la demanda, explica Maximiliano, al frente de la empresa Piletas Rosario, una constructora que lleva 25 años en el rubro. El año pasado el grupo construyó 23 piletas y este año ya llevan 55 construidas o por construirse de acá hasta el mes de febrero.
La demanda es tal que si bien los tiempos estimados son siempre de 8 días para terminar una pileta de tamaño estándar, de 6 metros de largo por 3 de ancho, al haber tanta demanda la entrega de materiales y accesorios está demorada, señala. Bombas, filtros y caños se ven en faltante en toda la región.
Alberto Ferraro, de Construcciones AF, otra compañía con un cuarto de siglo en el rubro coincide en que muchos pileteros no consiguen materiales para terminar las piletas debido al incremento en la demanda. La empresa AF cuenta con un stock de accesorios grande que garantiza cubrir las necesidades de sus clientes, pero a diferencia de otros años no está pudiendo proveer con facilidad a otros pileteros que les compran a ellos los materiales.
Ferraro grafica: “Recibimos entre 20 y 30 pedidos de presupuestos al día”. El interés continúa en alza desde mediados de año, tal como señalaron otros constructores del rubro.
Los tiempos previstos para la construcción de cada unidad se estiman entre 7 y 8 días. En el mercado hay gran variedad de precios, pero esa disparidad se debe a la técnica con la que trabaja cada empresa. Una pileta estándar construida en ladrillos oscila entre los 350 mil pesos. Una pileta de unos 8 metros de largo por 4 de ancho, construida con hormigón está valuada en unos 750 mil pesos.
Las localidades dónde más demanda hay son las que rodean a Rosario: Pueblo Esther, Funes, Roldán y Ricardone son ciudades dónde este verano se registran más tareas. Los barrios privados La Carolina y Los Robles también.
El rubro también ha empujado la posibilidad de brindar trabajo, ya que muchas empresas debieron reforzar su personal para dar a basto y cumplir con los compromisos en la entrega de unidades.