La consultora especializada en recursos humanos, Adecco, realizó un estudio acerca de la relación entre la carga de trabajo y la salud mental vinculado al estrés post pandemia y la permanencia de las personas en sus actuales empleos.
Según el informe, que incluyó a Argentina, el 47% de las empresas afirmó que espera un aumento en la rotación de empleados en los próximos 6 meses, mientras que, cuando se les consultó a los empleados acerca de cuánto tiempo piensan quedarse en la compañía en la que están trabajando, el 52% de las personas con un contrato por tiempo indeterminado dijo que piensa dejar la empresa en los próximos años, y 1 de cada 10 cree que lo hará en el próximo año.
Desagregando por generaciones, 2 de cada 10 empleados de la Generación Z piensan irse en un año. Estos datos pueden verse influenciados por el lugar de trabajo, ya que los empleados que trabajan desde la oficina son más propensos a querer dejar la empresa en los próximos 2 años (29% vs. 15%). A su vez, quienes trabajan en empresas pequeñas piensan dejar la empresa antes (31% en los próximos 2 años).
A su vez, la percepción de los empleadores es que el 59% de los empleados siente más estrés, el 34% el mismo y el 7% menos que antes. Mientras que entre los empleados, el 25% dijo tener más estrés que antes, el 56% que tiene el mismo y el 19% siente menos.
Ante la consulta de cómo influyó la pandemia en la carga de trabajo y en el estrés, el estudio se encontró con dos visiones: por un lado, en los empleados, el 53% siente que tiene la misma carga de trabajo; el 31% que tiene más trabajo que cumplir y el 16% menos. Sin embargo, la percepción de los empleadores difiere en algunos puntos, ya que el 48% cree que tienen la misma carga laboral; el 41% dice que tiene más trabajo para cumplir y el 11% menos trabajo que cumplir.
Según el estudio, la generación millennial es la que sintió más carga laboral y a su vez más estrés. En una diferenciación por género, las mujeres percibieron más carga de trabajo y también exceso de estrés en el trabajo (3 de cada 10 de ellas, en cambio los hombres 2 de cada 10).
Con relación al lugar de trabajo, quienes se desempeñan desde su casa tienden a considerar que poseen más trabajo desde el inicio de la pandemia (36% vs. 30% presencial), pero la evolución del nivel de estrés permanece constante (31% desde la casa vs. 27% van a la oficina).