El consultor y analista político Andrés Mautone, analizó en Fisherton CNN los resulados electorales de las elecciones de medio término, dejando algunas consideraciones para reflexionar.
Es una elección que al Frente Progresista debe preocuparle mucho. Cambiemos ganó en todos los barrios de Rosario y mala elección del Frente Progresista.
En las seccionales que durante toda la década del 90 y buena parte desde el 2000 hacia adelante, el socialismo homogeneizaba con su voto, por ejemplo, en Distrito Centro donde hacía su gran diferencia, de las seccionales 1ª a la 7ª inclusive, y esto ha cambiado, y los números mostraron que se volcaron esta vez por el candidato del PRO, Roy López Molina.
Hay un dato muy importante, del comportamiento de los santafesinos en particular, en cuanto a cómo votan en las PASO y después como votan en la General, recodando que prácticamente no había internas en el Frente Progresista, aclarando que prácticamente la suerte estaba echada ya que era claro que la gente que votara por este partido lo haría por Pablo Javkin por sobre Sebastián Chale.
Pero se debe tener cuidado porque no son predictivas las elecciones PASO respecto de las de octubre. Se podría tener en cuenta que algún elector haya optado por la interna del PRO porque realmente estaba “picante”, evaluando si luego se mantendrán, de todos modos, más allá de esto, Mautone cree que no habrá mucho corrimiento en los votos. Hay que ser prudentes.
Lo mismo ocurre a nivel provincial.
Hay mucho para analizar, y demasiadas alternativas por pensar. Los votos de Jorge Boasso, los de Amalia Granata, solo por citar algunos casos, como para ver cómo quedará armado el tablero, sabiendo que “los puntos” como se dice en el fútbol, se juegan en octubre.
Mientas pasan las horas y los días, se va desapasionando el tema ya hay que poner los ojos en octubre, y lo que fue derrota se puede transformar en triunfo en aquellos resultados ajustados.
Lo cierto es que el Frente Progresista perdió un gran terreno, el Frente justicialista puede variar en virtud de la composición de su lista; es decir, ahora comienza otra elección.
Hay que analizar también cuando una táctica electoral encuadrarla dentro de una estrategia de gobierno a partir del 10 de diciembre con bancas que van a cambiar, tanto en la Cámara Baja como en Alta, de un tenor y de un perfil de los legisladores muy distinta a la actual.
Aquellos políticos que fueron votados en 2013, muchos tenían un perfil que va a ser muy diferente a los que ocupen las bancas sobre finales de este año. La táctica para ganar una elección es una cosa, la estrategia para gobernar es otra, con un Congreso que será distinta y donde las radicalizaciones serán muy fuertes, y pensando también en 2019.
Si bien fue una campaña bastante nacionalizada, el rosarino fue más localista y pudo mostrar su intención en la elección de candidatos a concejales. Sin embargo, Mautone, deja una observación; si bien fue muy de “aldea” lo relacionado a concejales, en la categoría de diputados nacionales, donde Carlos Del Frade, había hecho una excelente elección en el año 2015 para diputado provincial y obviamente su intención era repetir su performance para esta elección, sufrió la polarización que se instaló a nivel nacional, perdiendo casi la mitad de los votos que había obtenido en aquella oportunidad.
Entonces, a nivel de diputados nacionales, se nacionalizó, y la polarización fue muy importante, casi imprevisible en todos los análisis previos.
Y otro punto que el consultor rosarino destacó fue la participación ciudadana, de aproximadamente el 75%, que, a vistas previa, parecía muy apática, siendo muy superior a las elecciones de 2013 y 2015.
Habrá que ver entonces, como votará la gente en virtud de cómo queda armada la grilla de candidatos y sus listas, de acuerdo a los que pasaron y los que quedaron en el camino.
