Mejorar la Empresa Provincial de la Energía (EPE) es uno de los principales objetivos de la gestión de Maximialiano Pullaro. El nuevo directorio asumido en diciembre retrató en varias oportunidades el déficit de la empresa, la falta de inversión y el mal funcionamiento en el área de control, permitiendo el robo de energía, que en varios casos alcanzaron cifras millonarias. Particularmente en Rosario, el vicepresidente de la EPE, Lisandro Peresutti, identificó una “infraestructura vetusta con un 30% de cableado con más de 50 años”, en declaraciones para CNN Radio Rosario.
Peresutti hizo referencia a los inconvenientes eléctricos que predominan, sobre todo en temporada estival, en Rosario y remarcó: “El gobernador Pullaro está muy al tanto, hizo foco en la ciudad y nos encomendó que el plan 2024-2025 sea mejorar para el verano. No podemos poner más excusas porque la temperatura tropical va a seguir existiendo”.
“Hay un cambio climático que eso lo percibimos claramente, tenemos que prepararnos para eso, es cierto que las inversiones son muy costosas, porque desde un transformador hasta una bobina es todo importado”, agregó el funcionario.
El vicepresidente de la EPE planteó que la empresa tiene un gran desafío en los “pendientes”, es decir, edificios construidos y habitados con “palo y cajón de luz de obra”, aunque aseguró: “Estamos en un plan para poder ir habilitándolos de acuerdo”.
Sobre este punto marcó que existen 150 pedidos sobre este tipo de conexiones y si bien remarcó la existencia de un plan, dijo: “En el contexto en el que estamos, no es sencillo, el dinero que estamos recibiendo no es el mismo y la EPE necesita subsidios”.
Otro punto que abordó es la composición de la boleta en los usuarios: “Sé que es un tema ríspido el de las tarifas y que genera rechazo, pero la realidad es que si no se acompaña la actualización los cortes se van a multiplicar por 10”.
“La tarifa recibida en nuestro domicilio se compone de 3 factores, uno es el descargo de la energía, de CAMESA, que la EPE lo traslada directamente y que el 1° de febrero aumentó un 83%. Después tenés el costo de la empresa, el costo operativo, mantenimiento, materiales, salarios, obras, inversión, ese es un 35%; y el otro 30% son impuestos”, detalló Peresutti.
Los aumentos que los usuarios perciben -aclaró el vicepresidente de la empresa estatal- no corresponden a los costos de la EPE y adelantó que se lanzará una campaña para que los usuarios comprendan los detallados de la factura.
