El expresidente del Gobierno de España, José María Aznar, participó de la Cena Anual de Fundación Libertad y del seminario internacional que organizó la institución local en Buenos Aires con motivo de su 36 aniversario.
Entrevistado por el presidente del think tank, Gerardo Bongiovanni, Aznar ponderó el valor de la democracia, el Estado de Derecho, la tolerancia y el pluralismo, así como también dijo creer en las ideas por encima de los algoritmos y en la solidaridad, el mérito, la competencia, el respeto a la propiedad, la responsabilidad, el esfuerzo y la libertad “como la gran fuerza y confianza de la sociedad”.
No obstante, el exmandatario sacudió a los presentes con varias luces de alarma encendidas tanto para Iberoamérica como para Europa. “Es un mundo que vive sin reglas y en desorden, lo que hace que vivamos el momento más delicado desde el punto de vista de la seguridad y nuestras libertades desde la II Guerra Mundial”, señaló. “Es Rusia, es China, es Corea del Norte, es Irán: todos los poderes que quieren revisar la prevalencia de Estados Unidos y sus aliados en el mundo, lo que produce elementos de inestabilidad muy profundos”, sostuvo.
Si bien apuntó que observa “con esperanza” la nueva etapa en Argentina, a partir del cambio de gobierno, advirtió que “el mayor riesgo que tiene Iberoamérica en el mundo que está viniendo es la irrelevancia”. Explicó que en este contexto, esa irrelevancia “es especialmente peligrosa”, porque “se puede convertir en terreno de competencia entre grandes potencias”. “Y si eso fuese así -dijo-, condenaría a toda una región al ostracismo durante mucho tiempo”.
En ese sentido, llamó a delinear una “estrategia inteligente” que permita a los países “ganar presencia y peso en el mundo”, y preguntó: “Nosotros, en el Atlántico Sur, con las mayores reservas de petróleo, de gas, de minerales, de agua y de alimentos, ¿no somos capaces de organizar las cosas de tal manera que nuestra influencia en el mundo mejore?”.
Por otra parte, también alertó por el declive de Europa y señaló: “No estoy seguro de que vayamos a ver en el corto plazo un mundo post-americano, pero sí creo que vamos a vivir un mundo post-europeo en el sentido de una menor influencia de Europa, si Europa no reacciona”.
A su vez, Aznar se refirió al conflicto en Oriente Medio entre Irán e Israel y afirmó que “Israel, que es una democracia occidental, no solamente tiene el derecho y la obligación de defenderse de los ataques terroristas, sino que tiene, por el bien de la paz y la estabilidad del mundo, que terminar su tarea y ganar la gran batalla en la cual está en este momento”.
Es que para el expresidente español, si el conflicto “no se resuelve bien, significa que Israel es eliminado del mapa y que Estados Unidos pierde su posición en la región. Y si eso ocurre, ¿cuál es el siguiente muro de contención ante el chiismo revolucionario? Son las costas del sur de Europa”, alertó y cerró: “Si Israel fracasa en la operación, solo habrá un triunfador y será Hamás, Hezbolá e Irán, que serán los que marquen la política”.
BAJÓ LA GUARDIA
Consultado por la influencia del liberalismo tras la caída del Muro de Berlín, Aznar consideró que “el mundo liberal bajó la guardia y ahora tiene enfrente un conjunto de tiranías, que no están sujetos a ningún control, más que a sus caprichos , y que reescriben los hechos y definen los acontecimientos según su estricta conveniencia, siendo enormemente destructivos para la sociedad”.