Según informa ok, un medio español, el FC Barcelona estaría a un paso de cerrar el acuerdo que convertiría al grupo norteamericano Pepsico en nuevo patrocinador comercial de la camiseta del FC Barcelona para las próximas temporadas, un extremo que tiene importantes connotaciones colaterales y que justificaría el viaje de una delegación del club a los Estados Unidos en los últimos días para cerrar el acuerdo.
Ruptura de negociaciones
La encrucijada en la que se ha metido el FC Barcelona él solito para poder encontrar un patrocinador comercial dispuesto a aportar el dinero que pide el club a la marca interesada en este tipo de acuerdo, después de tener el mismo prácticamente cerrado con Qatar Sport Investment antes de las elecciones presidenciales de la entidad celebradas el año pasado ha provocado verdaderos (e inesperados) cambios de sentido a la hora de sentar las bases para concluir con la llegada de un nuevo sponsor al club.
Sin embargo, el tira y afloja en el que se vieron inmersos tanto el Barça como Qatar tuvo su punto culminante hace apenas diez días cuando se conoció el acuerdo al que había llegado la máxima autoridad qatarí para negociar este tipo de alianzas, Qatar Sports Investment, con el Bayern de Munich alemán para convertir aDoha Airport, el único aeropuerto comercial de Qatar, en patrocinador de la camiseta de entrenamiento del club alemán.
Ello provocó que los nervios aparecieran en la junta directiva del Barça, que veía como su estrategia por renegociar el acuerdo con Qatar a base de presionar a la entidad con potenciales alternativas se venía abajo ante la posibilidad, más que real, de que Qatar estuviera considerando la opción de dejar pasar la baza FC Barcelona para centrarse en otras alternativas igualmente mediáticas pero más económicas en términos de inversión como Bayern de Munich, ya conseguido, o PSG.
El viaje express que llevaron a cabo una importante delegación del FC Barcelona a Doha para tratar de reconducir las negociaciones se encontró con una QSI con una posición de fuerza que hasta ahora no se había manifestado: inamobible en sus pretensiones, el Barça accedía a respetar el preacuerdo alcanzado antes de las elecciones por 60 millones de euros anuales y la liberación de la camiseta de entrenamiento del club.
Pero a estas alturas, los jeques árabes se habían cansado de la informalidad de Bartoméu y compañía en los puntos acordados para dejar claro su poca predisposición a cerrar, ahora, su alianza. Con estas noticias, otra delegación partía para los Estados Unidos hace apenas unos días para tratar de cerrar un acuerdo con una de las alternativas que el club se había planteado y cuyo nombre se conoce ahora: Pepsi.
¿Último golpe de Qatar?
La apuesta de Pepsi por incorporarse a un club como el FC Barcelona se encuadraría dentro de la estrategia que está llevando a cabo el grupo Pepsico para utilizar el deporte como punta de lanza de su nueva política de expansión de marca vinculada al mismo. Pepsi es precisamente la patrocinadora del conocido halftime de la Super Bowl que se celebra este próximo domingo y marcas pertenecientes al grupo como Gatorade, Pepsi Max o Lay’s se ha incorporado al catálogo de patrocinadores oficiales de la Champions League.
En los Estados Unidos, la disputa con su rival Coca Cola le ha llevado a perder competiciones como la MLS,afrenta que ha sido respondida por la multinacional arrebantando a Coca Cola una competición como la NBA, de la que Pepsi es nuevo patrocinador oficial. También patrocina la NHL, la NFL y la MLB.
Con el FC Barcelona, la relación no es novedosa. Gatorade, una de las marcas del grupo, ya es sponsor del club desde el año 2013 y varios de los integrantes de la primera plantilla azulgrana son embajadores de marca de la firma como Luis Suárez o el propio Leo Messi.
Sin embargo, en el FC Barcelona hay temor a una última respuesta de Qatar. El acuerdo a firmar con Pepsi, según ha podido conocer Marketing Deportivo MD, estaría en las cifras, como mucho, que Qatar ofreció en un primer momento (alrededor de 60 millones de euros anuales), y en el Barça temen que el derecho de tanteo que tiene QSI sobre el patrocinio comercial de la camiseta del club provoque un último giro inesperado que haga que iguale la oferta de Pepsi y renueve con el club azulgrana, lo que en el Barça verían como un nuevo e importante golpe a la reputación de la marca del club que ya lleva sufridos varios en todo este proceso.
