Disneyland Paris está en problemas. Las amenazas terroristas y la caída del gasto entre los visitantes generaron que sus cuentas se encuentren en jaque. Por eso, la casa matriz saldrá en su ayuda movilizando cerca de 2.000 millones de dólares (1.860 millones de euros). Con esta operación, Disney se quedará con el control total del capital del complejo parisino.
El total de visitas al parque temático cayeron a 13,4 millones en 2016, frente a casi 14,8 millones en el ejercicio precedente. Mientras tanto, Disney cita expresamente el “impacto negativo” de los atentados de noviembre de 2015 en los que murieron 130 personas, en este desplome.
Las noticias negativas llegan en el mismo momento en que el parque cumple su 25° aniversario. La inyección de liquidez se hace de la siguiente manera: por un lado, eleva del 76,7% al 85,7% su participación en Disneyland Paris comprando las acciones del príncipe saudí Al-Walid ben Talal y ofrece hacerse con el resto del capital en una transacción valorada en 380 millones de dólares (356 millones de euros). En paralelo, hace una aportación de 1.600 millones para cubrir otras “necesidades financieras”.