Un exconcesionario santafesino analiza un embrago millonario. Luego de haber ganado un juicio contra el Estado Nacional por el rompimiento de un contrato, la francesa Suez podría asegurarse el pago incautando un total de US$ 630 millones. Mientras tanto, continúan las negociaciones para evitar la situación.
La disputa es parte de la historia reciente. Agbar y Suez, junto a grupos internacionales como Vivendi o AWG tenían a su cargo el servicio de aguas en las ciudades de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires. Tras la crisis de 2001, las compañías instaron al Gobierno argentino a negociar una suba en las tarifas, pedido que fue negado por el Ejecutivo a cargo en el momento del reclamo, de Néstor Kirchner. Esa negativa motivó a las empresas a iniciar una demanda judicial contra la Argentina en el CIADI, el tribunal de resolución de conflictos internacionales del Banco Mundial.
Específicamente, el organismo de arbitraje otorgó US$ 405 millones en daños y perjuicios a un consorcio, de los cuales US$367 millones son solo para Suez, para compensar la cancelación en 2006 de un contrato para una concesión de agua en el área de Buenos Aires. Al tiempo que ordenó pagar a Suez y sus subsidiarias US$ 225 millones por cancelar una concesión en Santa Fe.
Además de explorar la posibilidad del embargo – según Bloomberg- la compañía francesa también podría decidir acercarse a los bancos o fondos de cobertura para ver si están interesados en comprar la deuda.
REDACCIÓN ON24