¿Qué se hace con las miles de toneladas de escombros que generan las demoliciones o refacciones en Rosario y la región?
La empresa Razzini Industrial, integrante del Grupo Razzini, es la encargada de procesar esos residuos pesados y darle valor nuevamente, generando productos que vuelven a las obras en construcción.
Se trata de una práctica que la firma ha logrado profesionalizar a través de la investigación, la gestión y la inversión a un proceso que aporta tanto al medio ambiente como también a la economía. La empresa tiene la primera “Planta de Reciclaje de Áridos” del país, innovando procesos productivos y beneficiando también a la sociedad.
“Nosotros procesamos alrededor de 700 toneladas diarias que son todos restos de obra, tanto de demoliciones como de reparaciones de calles, de hormigón y de restos de hormigoneras”, comentó Leandro Razzini, socio gerente de la empresa que tiene su planta en calle 1912 s/n (Uriburu al 7500).
En ese sentido, detalló: “De esos mismos materiales, parte los volvemos a reutilizar en nuestro proceso, ya que tenemos una planta de hormigón también, o sea que el hormigón reciclado lo volvemos a reutilizar en el hormigón, y lo que es escombro lo vendemos en el corralón como tal o lo comercializamos en otros corralones”.
Se trata de un circuito virtuoso que ha logrado cerrar el círculo para un beneficio superlativo: realizar una gestión de estos residuos en orígen y de comercializar áridos reciclados de alta calidad a precios competitivos.
“Esto nos ayuda a bajar costos y más que nada a reemplazar recursos naturales que se dejan de explotar y se reutilizan. Al no tener desperdicios se puede reutilizar todo, no tenemos prácticamente desperdicios”, subrayó Razzini.
Entre los productos que se generan gracias al reciclado aparecen el hormigón reciclado, muy utilizado como gravilla para nuevos proyectos de construcción; granza fina, también llamada cascote y escombro molido que se utiliza generalmente usada para cimientos y contrapisos; arena de trituración, un producto ecológico y 100% reciclado y granza mezcla media, que se usa en contrapisos menores a cinco centímetros, pendientes de techos y base para canchas deportivas.
Asimismo, Razzini produce también adoquines que sirven para calles y veredas. “También tenemos una fábrica de adoquines intertrabados que son producto de materiales reciclados. Lo utilizamos y con eso reemplazamos recursos naturales como piedra o arena”, agregó el empresario.
A pesar de que se trata de una propuesta joven, Razzini apuesta a ratificar ese rumbo sabiendo que el reciclado no solo es un aporte al sector y al sostenimiento propio, sino también al medio ambiente y a la sociedad. “Con la planta de reciclado tenemos ideas de seguir creciendo para otros lados, pero también dependemos un poco de la Argentina”, indicó.
EL EFECTO OBRA PÚBLICA Y CRÉDITOS HIPOTECARIOS
La decisión del gobierno nacional que conduce Javier Milei de ponerle un freno de mano a la obra pública ha socavado los procesos de muchas empresas del rubro de la construcción. No obstante, desde Razzini señalaron que “la obra pública no es su mercado objetivo” aunque sí los afectó, por ejemplo, en la comercialización de adoquines, que son consumidos por municipios y comunas.
También es correcta la reflexión que hace Leandro Razzini quien sostiene que, a pesar de no estar perjudicados directamente por la falta de obras públicas, muchas de las empresas que se vieron desahuciadas ante esta situación, terminan sumándose a otros mercados en busca de la demanda perdida.
Por otra parte, el anuncio por parte de diferentes bancos del lanzamiento de nuevos créditos hipotecarios reabrió la expectativa en el sector. “Hay tres factores claves que son los que estamos todos atentos: los créditos hipotecarios, la cosecha y el blanqueo. Son piezas fundamentales para que todo vuelva a niveles normales”.