Lunes 26 de febrero de 2018
El debate acerca de la instalación de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) vuelve a levantar polvareda. Por un lado, el enfoque de la tradición del fútbol argentino, cuya concepción de los clubes es la de instituciones sin fines de lucro en las que los socios eligen a sus directivos; por otro, la postura del gobierno que pretende instrumentar la legalización del libre ingreso de capitales privados. Este anteproyecto surgió como un camino en la búsqueda de sanear las instituciones, al tiempo que podría incentivar la llegada de inversores, como ocurre en otras partes del mundo como Inglaterra, España, Alemania y México.
Mauricio Macri ya había manifestado sus intensiones en marzo de 2016 cuando, en una entrevista con Marcelo Longobardi, expresó que “el fútbol tiene que aceptar implementar optativamente la figura de la sociedad anónima”. El actual Presidente de la Nación ya había presentado esta propuesta en el año 2000, cuando todavía ocupaba el máximo cargo en la dirigencia de Boca Juniors. En aquella oportunidad, su moción fue descartada por el resto de los presidentes, perdiendo en la votación por 38 a 1.
Ahora el tema parece volver a tomar vigencia. Según había trascendido la semana pasada, algunos clubes habían sido apuntados para experimentar con el nuevo formato, entre ellos, Newell´s Old Boys.
El rumor despertó enseguida el malestar de los hinchas y trajo aparejados los reclamos por parte de los partidos de oposición a la actual dirigencia leprosa. Sin embargo, la comisión directiva emitió un comunicado sobre el cierre del viernes en el cual se dejaba en clara una postura en contra de la implementación de las SAD. “El proyecto que se viene impulsando desde el gobierno nacional para que se abra la participación de inversiones privadas en las instituciones de fútbol de nuestro país podría ser viable en algunos casos excepcionales pero en absoluto estaría en línea con lo que el socio de Newell’s tiene como concepción y como parte de su identidad”, se manifestó.
Otro de los párrafos que marcan postura, sostiene que “(…) las Sociedades Anónimas Deportivas entrarían al escenario de nuestro fútbol desvirtuando su esencia. Creemos que los clubes, como el nuestro, son organizaciones con rasgos únicos, comunidades que tienen su propia historia, su forma de sentir la vida y con procesos internos que regulan el desarrollo institucional”.
Lo cierto es que el manifiesto emitido desde el Parque Independencia pone sobre el tapete la trascendencia que va tomando esta iniciativa para transformar el fútbol nacional. “Si bien por el momento solo es un anteproyecto, los rumores de que habría una real apertura del fútbol a los capitales privados son cada vez más firmes y ya se muestran precisiones sobre el avance del mismo. Incluso ya habría reuniones con empresarios y sectores dispuestos a realizar inversiones”, remarcan en el texto las autoridades rojinegras. Con lo cual, el debate acerca del futuro de esta idea será, sin dudas, uno de los temas que dividirán aguas en este primer semestre.
Cabe destacar que, como ya había publicado ON24 en su momento, Rosario Central había dejado en claro su rechazo a las SAD en 2016. De hecho, el Canalla dejó asentada formalmente esta posición a través de una modificación en su estatuto.