Varios son los sectores que denunciaron grandes aumentos desde el cambio en el Ministerio de Economía de la Nación y uno de los que más siente la inflación son los kioscos. “El aumento de precios es de un 10 y un 15 por ciento por mes desde el comienzo del año”, expresó Marcos Di Filippo, presidente de la Cámara de Kiosqueros de Rosario, en diálogo con ON24.
“Venimos de estos años de pandemia donde fuimos muy golpeados y esperábamos aumentar las ventas cuando las medidas contra la pandemia fueran menores, pero nos encontramos con aumentos constantes y nosotros hoy cada 20 a 30 días recibimos nueva lista de precios y en algunos productos llegó a ser cada 15 días”, evidenció el referente kiosquero. Aseguró además que los aumentos en el mes de julio rondan entre un 15 y un 20%, por encima del promedio mensual del 2022.
En este marco, Di Filippo reconoció que esos porcentajes “no los podemos absorber” y marcó incrementos en lo que va de julio del 10% en lácteos y cervezas, un 15% en harinas y derivados y un 20% en rollos de cocina y papel higiénico. Por otro lado, los precios de productos importados como el café crecieron un 30%.
Por otro lado, el próximo lunes, los cigarrillos sufrirán un aumento, aunque no reveló de cuánto se trata. Y aclaró que, si bien en otros puntos del país anunciaron faltante a la hora de distribución, en Rosario no será así y los distribuidores oficiales Millenium y Merconor “están entregando con normalidad, siempre respetando los pedidos con normalidad, es decir que no podés comprar para hacer stock días antes del aumento”.
Si bien los kioscos no se referencian como vendedores de productos de primera necesidad, a partir de la pandemia comenzaron a comercializarlos, aunque, según confió Di Filippo, “se hace muy difícil conseguir, por ejemplo, aceite y cuando lo tenemos no es un precio razonable”.
Frente a esto, reveló que le enviaron un petitorio a la Secretaría de Comercio de Santa Fe solicitando control en los precios de las distribuidoras, ya que, los comercios pequeños por su volumen de compra se abastecen de las distribuidoras y no directamente con las empresas.
Por último, hizo un breve balance del año y destacó que los primeros meses fueron positivos, pero se lamentó que “se vio apagado por los constantes aumentos. No tenemos capacidad de acopiar mercadería, nos encontramos con quiebra de stock y no podemos mantener el precio a nuestros clientes. Por eso queremos que se tomen medidas y podamos repuntar un poco la venta”.
