La icónica bajada Sargento Cabral recobra un espacio gastronómico que supo ser faro de la zona. Durante muchos años en Sargento Cabral 519 funcionó La Vaca Negra, el primer café que trajo el grano Illy arábico. Un punto de encuentro que ahora será ocupado por Rufino, una nueva propuesta que llega con impronta propia, pero con la expectativa de atraer a los fieles clientes de la zona.
Rufino abrió sus puertas el pasado lunes con una capacidad para casi 30 clientes entre su salón y mesas a la calle. El nuevo local se presentó ante ON24 como una propuesta que combinará “lo tradicional y la especialidad de los bares”, afirmaron al unísono Hernán y Mariana, la pareja de emprendedores que decidieron darle riendas sueltas a esta iniciativa que, según ellos, “se viene pensando hace dos años”.
Cuando decidieron emprender en Rufino fue todo frenético. Mariana trabajaba en una reconocida parrilla de Fisherton y por medio de un compañero de trabajo encontró el local de 40 m2 a metros del Edificio de la Ex Aduana. La pareja también fueron los encargados de remodelar el lugar, una tarea que le llevó poco más de 60 días.
Rufino no será puntualmente un café de especialidad, pero sí tendrá una carta moderna. “Queremos que tenga un toque clásico y también con un menú actualizado”, esgrimieron. Entre sus opciones, además de café, el bar presentará una pastelería artesanal y opciones para almorzar, veganas y sin TACC.
“Notamos que desde que empezamos a trabajar en el armado de la cafetería los vecinos se acercaban y preguntaban. Los primeros clientes son los que ya venían antes y queremos que vengan a disfrutar del momento de tomar un café”, comentaron.
En sus primeras semanas, Rufino tendrá sus puertas abiertas desde las 7 hasta las 21 de lunes a sábados y domingos por la mañana. Aunque aclararon que se adaptarán a la clientela del barrio, que irán conociendo con el correr de los días.
Hernán reveló que, más adelante, están planeando sumar una opción de after office con aperitivos y tragos.
