El desarrollo de Rosental Inversiones y Obring abrió sus puertas a la prensa en la mañana de hoy. De espaldas a una gran fosa en plena actividad, en la esquina de Av Rivadavia y Rodríguez, hablaban Lisando Rosental y Pablo Gagliardo. Entremezclados con los periodistas, estaban presentes comercializadores, arquitectos, ingenieros, parte del equipo que lleva adelante el novedoso proyecto y también inversores, entre los que se destacaba la figura de Roberto Sensini, el ex defensor de NOB. Costavía ya lleva vendido en la pre venta el 30% de la primera torre, además de contar con el impulso de inversores que acompañan a Rosental en diferentes proyectos, como es el caso del ex jugador de la selección argentina.
Consultado por el perfil de compradores que ya optaron por el emprendimiento de Pichincha, Franco Gagliardo -titular junto a su hermano Pablo de Obring-, aseguró: “compró el que viene a vivir, la mayor cantidad de departamentos que compró una persona han sido 3 unidades”, dejando la comercialización de Costavía en manos de las MA Propiedades y Crestale.
El empresario confió a ON24 el buen resultado que trajo para la venta la eliminación del tradicional cerco perimetral que posee toda obra en construcción. En este caso, la constructora montó un vallado de rejas para que el público pueda observar el proceso de la obra.
Tres diferenciales de la obra
Vestida de verde
“Costavía se convertirá rápidamente en un ícono de la ciudad por su fachada de hormigón a la vista que, completamente vidriada, permitirá una continuidad visual desde el interior hacia el exterior, y estará también “vestida” con extensos aleros y plantas, formando un jardín vertical que cubrirá la totalidad de la obra desde la planta baja hasta sus terrazas con un privilegiado mirador al río y el centro. Esta cobertura verde, además de cortina para ofrecer intimidad a las unidades actúa también como filtro térmico” explicó Pablo Gagliardo, quien además puso acento en esta idea que, en contrapunto con las edificaciones de principios del siglo XX tradicionales de la zona, revitalizarán Pichincha con este juego en el que lo antiguo y moderno conviven en armonía.
Estación de carga
Las cocheras incluirán instalaciones para carga de autos eléctricos, confiaron los desarrolladores, seguros de estar “pateando el tablero” con propuestas que hoy el mercado inmobiliario no posee.
Planta baja pública con calles integradoras
El sector de la planta baja será un espacio público, con amplios accesos, incluso para el paso de ambulancias, conectando con calles internas Av Rivadavia con calle Güemes.
Será además un paseo compras que revitalizará el movimiento comercial de Pichincha además de su seguridad.
