Son más de catorce millones de personas y algunos de ellos ya han empezado a jubilarse desde el 1 de enero de este año. Los Baby boomers, nacidos entre 1957 y 1977, se preparan para afrontar el profundo cambio de vida que supone la jubilación. Con ellos llega un nuevo paradigma que acaba con el clásico estereotipo del jubilado.
No se resignan a jugar al buraco, ni a pasarse los días mirando cómo avanzan las obras públicas y ni siquiera se conforman sólo con pasear con los nietos. Los baby boomers quieren disfrutar de una jubilación más proactiva, vivirán más años y exigen unas residencias modernas, con los últimos avances en telemedicina y digitalización, y con unas infraestructuras mejores que las actuales.
Esta nueva etapa de las residencias para la tercera edad va a requerir de una inversión de 1.500 millones de euros anuales hasta 2030. Porque sin que todavía hayan llegado los baby boomers, hoy la demanda de plazas es muy superior a la oferta y la situación se va a agudizar en el futuro. Si en la actualidad hay 9 millones de personas de más de 65 años, en 20 años serán 15 millones. La oferta de camas en las 5.600 residencias actuales es de 400.000 y se necesitan otras 100.000 para alcanzar el ratio de 5 camas por cada 100 personas mayores de 65 años, que es el nivel aconsejado por la OMS.
Este sector es uno de los que mayor crecimiento tendrá en el futuro, y de hecho ya se está produciendo una auténtica avalancha de fondos, gestoras, aseguradoras, inmobiliarias, Socimis, firmas de capital riesgo y family offices que quieren participar en este boom inversor que ofrece una importante rentabilidad. Sólo desde el punto de vista inmobiliario, la yield (retorno de la inversión) alcanza el 5% anual.
Los últimos jugadores que han entrado a competir son la aseguradora AXA, la inmobiliaria Renta Corporación y el fondo americano SixThirty, especializado en temas de salud y seguros. AXA Investment Managers se ha aliado con el grupo inmobiliario Lar con el objetivo de invertir 300 millones en residencias y centros de día para mayores. Lar tiene experiencia en este sector porque en su día fue accionista de las residencias Ballesol. Renta Corporación se ha asociado con el fondo de pensiones neerlandés APG para lanzar la Socimi Wellder e invertir 250 millones en España. El fondo americano SixThirty -que tiene detrás a aseguradoras como Allianz- ha entrado en España a través de Senniors, una compañía que proporciona cuidadores tanto a las personas mayores como a las dependientes. También ha entrado en Senniors el fondo español Sevenzonic, gestionado por Ángel Cano (ex-CEO de BBVA), Javier Rodríguez Zapatero (ex director general de Google España) y Juan Pedro Moreno (expresidente de Accenture España).
Además de nuevos entrantes, las residencias de mayores están viviendo un importante proceso de concentración. El grupo más dinámico y líder indiscutible del sector es la francesa DomusVi, que en su momento integró a Geriatros y SARquavitae. En la actualidad cuenta con más de 20.000 plazas y en su accionariado figuran su fundador, Yves Journel, y el fondo británico Intermediate Capital Group (ICG), que está siendo muy activo en el mercado español. A bastante distancia de DomusVi y con menos de 10.000 plazas gestionadas están Vitalia -controlada por los grupos de capital riesgo CVC y Portobello- y Orpea, participada por el fondo de pensiones canadiense CPPIB, el fondo soberano de Noruega y la gestora Vanguard.
La familia Mulliez, una de las más ricas de Francia, está presente en el sector a través de las residencias Amavir. Los Mulliez son los dueños de Auchan (Alcampo), Leroy Merlin, Decathlon, Kiabi y Norauto. También han entrado en este mercado las familias catalanas Carbó, Botet y Elías, que a través del family officeCaboel han invertido en residencias en Madrid parte de los fondos obtenidos con la venta de Caprabo a Eroski.
Las aseguradoras Santa Lucía -a través de su filial Ballesol-, Sanitas y Helvetia -con Caser Residencial- cuentan cada una con más de 5.000 plazas para mayores. Un tamaño similar tienen también Clece Mayores, empresa del grupo ACS, y la francesa Colisée, que hace unos meses compró las residencias de la catalana Blauclinic. Colisée está participada por EQT, el fondo sueco dueño de Idealista.
Aunque no gestiona las más de 50 residencias que posee, la inmobiliaria con más activos del mercado es la Socimi Healthcare Activos, que tiene un ambicioso plan de desarrollo y que cuenta entre sus socios con el fondo soberano de Qatar,Nationale-Nederlanden y CBRE IM. Otros importantes actores inmobiliarios son la belga Cofinimmo -apoyada por el gigante BlackRock- y la Socimi Adriano Care, gestionada por Azora.
Además de residencias más modernas y digitalizadas, los futuros jubilados buscarán también los denominados senior living, que son comunidades y viviendas adaptadas con servicios para los mayores. Los Baby boomers acogerán rápido este nuevo concepto porque están acostumbrados a grandes cambios. Son la generación que pasó de la dictadura a la democracia, la que asumió una nueva identidad europea, la que vivió el cambio de la peseta al euro, la que incorporó la mujer al mercado laboral y también la que se ha adaptado a la sustitución del mundo analógico por el digital.
Fuente: Expansión