La Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario giró a la Comisión homónima del Concejo dos ordenanzas que proponen cambios para las nuevas edificaciones, acordados previamente en el marco de la Comisión Asesora con los principales actores del sector privado (AEV, Colegio de Arquitectos y Cámara de la Construcción).
En diálogo con ON24, la secretaria de Planeamiento, Agustina González Cid, señaló que aunque son dos proyectos de ordenanza por separado, persiguen un objetivo en común, que es “hacer la ciudad más vivible para la gente”. Aseguró que eran ideas que “las teníamos en mente” y que “con todo esto de la pandemia, surgió la necesidad”.
Si bien dijo que los proyectos fueron “bien recibidos” en el Concejo, apuntó que aún no tiene definido si estarán los votos para aprobar las modificaciones. Por su parte, el concejal de CREO, Frabrizio Fiatti, indicó a este medio que el expediente “ingresó formalmente ayer”, por lo que agregó que lunes próximo recibirían en la Comisión a la secretaria municipal para tener de primera mano los detalles de las propuestas. La voluntad del oficialismo, aseveró el edil, es alcanzar un consenso entre los diferentes espacios políticos para darle luz verde a ambas iniciativas.
Concretamente, una de las ordenanzas propone la posibilidad de construir balcones más amplios. De acuerdo con la secretaria de Planeamiento, “hoy pueden volar por fuera de la línea municipal 1.20 metros con una profundidad máxima de 4/5 de la altura”. El cambio es llevarlos a 1.50 y que “se compute la profundidad del balcón junto con la del local para brindarle mayor flexibilidad al proyectista”. Además, podrán disponer de parrilleros exclusivos en el espacio comprendido entre la línea municipal y la unidad, y se va a permitir la colocación de parasoles en el filo exterior del balcón.
En tanto, la segunda ordenanza alude a un incremento en la altura permitida para las plantas bajas de las construcciones. “Vemos que las actuales quedaron muy bajas, de apenas 2.30 metros, en muchos casos, lo que no permite la ubicación de locales comerciales o gastronómicos. Con esta normativa, se aumenta esa altura a un mínimo de 3 metros”, sin disminuir la superficie de la construcción, explicó González Cid.
“Estamos haciendo mucho énfasis desde distintas secretarías en tener una ciudad mucho más caminable, que es hacia donde se dirigen las ciudades del mundo”, subrayó la funcionaria y ponderó: “Creo que es importante para la ciudad en general mejorar las plantas bajas porque es donde se vive el espacio público por excelencia que es la vereda (…) Va a dar más seguridad porque la relación entre el exterior y el interior se hace mucho más franca”, consideró.
Por último, agregó que entre los tres y los cuatro metros de la planta baja la ordenanza va a permitir también que haya balcones, recordando que, por ejemplo, “hoy en el área central están permitidos a partir de los cuatro metros”.
En representación de la Delegación Rosario de la Cámara Argentina de la Construcción, su gerente, Rubén Llenas, ratificó que los proyectos cuentan con la aprobación de la institución y destacó que los balcones más amplios “hubieran venido muy bien en circunstancias como las que estamos viviendo ahora, de aislamiento”.
Además, sostuvo que estas modificaciones “podrían hacer un poco más habitables las unidades y ordenan un poco más”, por lo que “nos parecen adecuadas”. A su juicio, “no necesariamente encarecen las propiedades”.
En la misma línea, Gabriel Redolfi, CEO de MSR Constructora, resaltó que el “impacto será sumamente positivo, porque el actual Código nos obliga a hacer plantas bajas enanas, que no son vivibles y tienen continuos conflictos con las instalaciones”. Entonces, destacó que el hecho de que la altura de ellas no compute dentro de altura máxima del edificio “es una gran ventaja”.
En cuanto a costos del producto final, el empresario rosarino afirmó que “no preocupa porque queda a elección del constructor si hace un balcón de un metro y medio o uno de tres metros. Lo importante es tener la libertad y los márgenes reglamentarios para poder hacerlo. Después, depende de cada constructor”.
Para finalizar, Redolfi expresó que “es una gran satisfacción ver que el Gobierno Municipal atiende cuestiones de lógica constructiva y de beneficio urbanístico” y concluyó que este tipo de intercambio “nos abre instancias de diálogo para otros temas, porque muestra que son proclives a escucharnos para tener una ciudad mejor”.
REDACCIÓN ON24
