La multinacional Dow anunció el lunes el cierre definitivo de su planta en la localidad santafesina de San Lorenzo, la única del país en fabricar poliuretano. La decisión, confirmaron desde la compañía, no tiene que ver con una crisis en la producción o las ventas, sino que apunta a cumplir con una decisión global orientada a reducir gastos operativos.
El emprendimiento local, que funciona normalmente en cuanto a volúmenes de rendimiento, correrá la misma suerte que otras plantas ubicadas en Estados Unidos, China o Australia.
El cierre se definió en julio del año pasado, pero recién este lunes se comunicó en la planta santafesina.
Dow resaltó que de ninguna manera la decisión está relacionada con el contexto sanitario actual o con circunstancias específicas de la Argentina. “Dow trabajará con sus clientes para asegurar la continuidad del suministro de nuestros productos y servicios”, detalló la empresa.
En la planta de San Lorenzo trabajan unos 110 empleados, 64 de Dow y el resto tercerizados. En ese marco, todos seguirán trabajando hasta que se cierre la planta y en semanas se iniciarán las conversaciones con el sindicato y los empleados para analizar detalles del proceso de desvinculación.
La planta de San Lorenzo estará cerrada por una cuestión de seguridad. “La cerramos para hacer el anuncio en las mejores condiciones. El miércoles vuelve a operar”, expresaron desde la compañía de origen estadounidense. Se trata de una planta de poliuretano, para colchones, el interior de los autos y aislantes para productos de línea blanca.