La cafetería de especialidad Groovin inauguró este mes su segundo local en la ciudad, cortando cintas en Montevideo al 1400, en el complejo de oficinas The Blocks, con la idea de continuar expandiendo la marca en el Centro y Macrocentro. Así, mientras transita los primeros días de esta apertura, ya planea una tercera para desembarcar en Pichincha, que “es el punto neurálgico de la gastronomía de Rosario”, afirmó a ON24 Ramiro Fasano, socio de la marca.
Concretamente, será en calle Jujuy, entre Oroño y Alvear, donde en su momento funcionó Temple Bar y antes, O´Connells. “Después de arrancar la obra en el local de calle Montevideo, nos surgió el de calle Jujuy, que no queríamos dejar pasar”, apuntó e indicó que eso coincidió con que dos de los tres socios de Groovin fueron padres en los últimos meses, por lo que decidieron esperar para comenzar con las remodelaciones del tercer punto.
“Ahí hay que hacer desde baños y cocina”, indicó el emprendedor gastronómico, por lo que estiman que las obras durarán unos 4 meses, a partir de marzo, cuando inicien. “La idea es mudar el tostadero que tenemos en calle Italia allí y seguir haciendo nuestra panificación y pastelería, además de la cafetería de especialidad que somos”, explicó.
Se trata de un local de unos 100 m2, distribuidos en planta baja y primer piso, donde se desplegarán producción y atención al público, estimando una capacidad de unos 120 cubiertos, además de un pequeño escenario para realizar las “Groovin Sessions”, de jazz, que se llevan adelante un domingo al mes, por las mañanas.
“Nuestro concepto es café y jazz”, resaltó Fasano, quien estudia música, toca la trompeta y es fanático de este estilo musical, por lo que se propuso combinarlo con la gastronomía, una fusión que ya había en Buenos Aires, pero no en Rosario. “Fui a Estados Unidos y conocí los jazz club de allá y quise abrir en Rosario algo así pero con café de especialidad”, destacó y agregó que “queríamos darle un espacio a los músicos de Rosario”.
Fasano sostuvo que, a partir de un cambio en las costumbres en el consumo de la gastronomía local, en el que la gente adelantó un poco a la noche y la tarde o la merienda van ganando terreno como lugares de encuentro, Groovin “se ha consolidado” por lo que “el desafío es mantener la calidad” de su casa madre (calle Italia 886), remarcó.
En ese sentido, consultado sobre una eventual expansión a zona oeste o Funes, señaló: “Me encantaría porque nuestra premisa es que siempre haya un Groovin cerca. La idea es siempre expandirnos, incluso a Buenos Aires”, manifestó y aclaró que, por ahora, sería sin modelo de franquicias, “para que no queden cosas fuera de nuestro radar o sin controlar y que no se desvirtúe la marca”.
REDACCIÓN ON24
