El barrio de Refinería está en constante cambio. Su fisonomía de zona obrera por la cercanía a los Talleres del Ferrocarril Central Argentino y la Refinería Argentina de Azúcar ya es otra. La irrupción del shopping y los grandes desarrollos inmobiliarios lo transformaron en una zona netamente comercial y así lo identifican los nuevos proyectos que llegan como “A Buen Puerto”, el bar estilo taberna que cortó cintas en Puccini al 500.
El comercio, que abre de jueves a domingo, tiene una ambientación náutica con detalles que evocan a un barco de principios del siglo XX. En esta línea, la cuenta del lugar llega dentro de un pequeño baúl con monedas simulando ser un tesoro o bien un bote salvavidas de costado dando la sensación de un elemento colocado en el estribor o babor de los barcos.
“Somos un bar de tapas, vinos y con buena música”, así se presenta en su Instagram la marca ubicada en Puccini 539.
Mucha madera, paredes con mobiliario marino, faroles de antaño, anclas y valijas de viaje decoran un lugar que cuenta con un salón cerrado, un patio interno y una tarraza de cara a la calle.
Antes de “A Buen Puerto”, el local fue ocupado por “A la Deriva, Bodegón del Mundo” un bar con una temática similar, pero para un público más joven, que trabajó durante tres años en el lugar.
Si bien el barrio de Refinería tiene en el Alto Rosario Shopping su máximo exponente comercial, las calles aledañas ven cómo otros proyectos pujantes hacen pie como Refinería Restaurante, que además de ser un referente gastronómico desarrolla una fuerte actividad de eventos como la presentación del conocido enólogo jefe de la bodega Catena Zapata, Alejandro Vigil, y María Sance, directora general del restaurante Casa Vigil y cofundadora de LoSance espumantes.
En febrero de este 2024, la marca Oh My Veggie plantó bandera en Vélez Sarsfield 546, en el corredor comercial de Condominios de Refinería.
Cabe destacar también la presencia de Pololo, pegado a “A Buen Puerto”, que ofrece pizzas italianas con heladería de Gianduia.
