La red de líderes empresariales LIDE Argentina llevó a cabo un nuevo seminario web del que participaron destacados referentes del mercado automotriz, como Rolf Epp (BMW Argentina), Cristiano Rattazzi (FCA) y Manuel Mantilla (Mercedes Benz Argentina), para abordar los desafíos y proyecciones del sector a partir del actual contexto de crisis marcado por la pandemia del coronavirus COVID-19 y sus efectos a nivel nacional y mundial.
“Todos los que estamos vinculados directa e indirectamente al mercado automotor estamos preocupados y tenemos razones para estarlo. Transitamos un presente difícil y nos dirigimos hacia un futuro incierto”, afirmó Rodolfo de Felipe, presidente de LIDE Argentina. “Vivimos una situación inédita, hace poco tiempo se estuvo cerca del millón de unidades producidas al año y en 2019 esa cantidad descendió a 460.000. El mercado del 2020 es una incógnita”, advirtió.
De Felipe agregó que existen 1.500 empresas argentinas en el sector automotor, con una cantidad de empleos que rondan los 260.000. Además, destacó que el es el segundo exportador más importante del país, luego del complejo sojero.
Por su parte, el CEO de BMW Argentina, Rolf Epp, manifestó que “la información de los patentamientos durante los primeros tres meses del año indica que su volumen es muy reducido”. En ese sentido, añadió que “en general, el mercado puede llegar a disminuir entre 200.000 y 250.000 unidades a lo largo del año”.
“El segmento premium está siendo afectado, probablemente, menos que los sectores masivos debido a la baja participación en el mercado total: aproximadamente el 2 por ciento. Ello no es bueno en sí mismo pero representa una importante oportunidad de crecimiento”, consideró.
Para Epp, “esta crisis es diferente a otras que hemos padecido”, porque, explicó, “las salas de venta han cerrado, no existe posibilidad de financiamiento, no hay venta de usados y los talleres no funcionan”, por lo que señaló que “estamos en un terreno desconocido”. “El tema de la liquidez se volvió primordial tanto para la empresa como para los partners, y en ello estamos trabajando en forma permanente”, apuntó.
Para finalizar, el ejecutivo aseguró que si bien el 2020 “será un año crítico”, aclaró que “los planes de la compañía referidos a automatización, conectividad, electrificación y servicios (ACES) continuarán llevándose adelante”.
En tanto, Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat Chrysler Argentina (FCA), compartió una serie de datos que ponen en contexto la gravedad de la situación que atraviesa el sector: “El volumen mínimo de autos fabricados en un año fue de 80.000 unidades en 2002, y llegamos a 940.000 hace unos años atrás. Para este año se preveían unas 360.000 unidades, pero dudo que se pasen las 250.000”.
Y continuó: “En mayo, las fábricas de FCA comenzarán a funcionar parcialmente, pero aun así dependemos de lo que suceda en Brasil, nuestro principal destino exportador, por lo que el futuro de la compañía es complicado”.
Continuando con la misma línea argumentativa, el CEO de Mercedes Benz Argentina, Manuel Mantilla, sostuvo que “para entender el efecto real de esta pandemia sobre la industria automotriz hay que tener presente que a nivel mundial hay una gran inversión para el desarrollo de nuevas tecnologías y muchos de esos proyectos se verán retrasados, con todo lo que ello implica”.
“Argentina debe prepararse para un futuro cercano teniendo en cuenta, al menos, dos factores fundamentales: lograr que las terminales comiencen a producir con las máximas medidas de seguridad. E insertar a la industria automotriz en el mundo -no sólo en el Mercosur- y convertirse en un jugador global. El tema impositivo es fundamental para ello”, cerró.