Mondeo más refinado y equipado

S-Max, Edge, Kuga y Mondeo. En el caso de este último, se trata de una berlina de grandes dimensiones, bien conocida en nuestro mercado gracias al éxito de ventas obtenido durante todas sus generaciones, convirtiéndose en un referente del segmento.

La gama Vignale afecta fundamentalmente al acabado y los equipamientos. En el primer caso, la calidad es mayor que las versiones convencionales de los modelos citados, así como su equipamiento cuyo resultado es un aumento en lo que se refiere a tecnología y confort.

Además, en este último factor, la marca americana ha hecho especial hincapié en la insonorización interior incorporando algunos sistemas muy innovadores. Un ejemplo de ello es el sistema denominado ‘Active Noise Cancellation’ que utiliza tres micrófonos situados en el techo del habitáculo interior que registran el sonido y a su vez emiten otro con un poco de desfase temporal para llevar a cabo su correspondiente cancelación. Este sistema no es demasiado apreciable en la insonorización, aunque su incapacidad de desactivación hace imposible saber cómo sería la conducción sin esta tecnología. En general, es posible afirmar que, en el habitáculo, no apreciamos demasiados ruidos exteriores. Buen trabajo.

Impresiones de conducción

El propulsor que equipado en esta variante de prueba es un 2.0 TDCi de 180 CV asociado a una caja de cambios automática denominada ‘Powershift’. Su comportamiento es realmente agradable. Si bien su potencia no le confiere un aspecto dinámico de alto nivel, es decir, no es un vehículo demasiado rápido, si muestra una respuesta progresiva y suficiente para un coche de sus características. Por supuesto, cabe destacar que, dentro de la gama Mondeo Vignale, podemos asociar mecánicas más potentes, pero no resulta un factor a recomendar. Con los 180 CV de esta variante diésel tenemos más que suficiente, además de conseguir unos consumos bastante comedidos, pues durante los más de 1.000 Km de nuestro test, no superamos los 6 litros/100Km de gasto mixto en recorridos cotidianos por autopista y ciudad.

En cuanto a confort de conducción se refiere, el Mondeo Vignale ofrece un nivel muy elevado en este sentido. Y es que es una berlina de grandes dimensiones que tiene como objetivo acomodar a sus ocupante para largos trayectos por carretera contando con un espacio suficiente para viajar de manera cómoda en todas las plazas. Tanto en la parte delantera como en la posterior, el espacio de los asientos es realmente agradable. Además, si sumamos el tacto de la dirección, firme pero confortable, así como la tecnología de seguridad incorporada que ayuda al conductor, nos encontramos con un vehículo que cumple a la perfección a la hora de viajar.

En ciudad nos encontramos con algún inconveniente que otro. Y es que, sus dimensiones no son grandes aliadas para maniobrar en calles estrechas o caminos de difícil acceso. Cuesta no encontrarse con algun que otro ángulo muerto. Ahora bien, la solución que ofrece Ford es equipar al Mondeo Vignale con tecnología de visión mediante cámaras que ayudan y mucho a este tipo de maniobras.

Datos técnicos