Las complicadas arenas de Medio Oriente ya no serán un escollo al menos para quien posean un Sand Racer 500 GT. La firma Zarooq finalmente presentó este poderoso SUV capaz de hacerle frente al duro desierto árabe.
Concebido por el diseñador británico Anthony Jannarelly para el exclusivo mercado de los Emiratos, este biplaza todo terreno es un producto de lujo que esconde un poderoso motor desarrollado por General Motors en formato V8 (6.2L) que entrega 525 caballos para sus 1.300 kilos. Cuenta con una velocidad final de 220 km/h.
Tiene una transmisión secuencial de cinco marchas elaborada para competición y la suspensión es especial para resistir los duros caminos: los amortiguadores provienen del Dakar. No le faltará tracción en las cuatro ruedas, sistema desarrollado especialmente por Lamborghini. Además, utiliza un gran porcentaje de fibra de carbono para alivianar su peso.
Producto de su espíritu aventurero, una de las principales medidas de seguridad para sus ocupantes serán las barras antivuelco. Precisamente sobre el interior, está a cargo de Mansory, una firma de lujo alemana que se dedica especialmente a transformar vehículos premium.
Zarooq, fundada por Mohammed Al Qadi, antiguo jefe de operaciones del circuito de Yas Marina de Abu Dhabi promete tener una fábrica en los Emiratos Árabes Unidos y otra en Mónaco. Las locaciones no son aleatorias. La Sand Racer tiene un costo de 450.000 dólares, y quienes la reserven, deberán esperan al menos seis meses para tenerla una vez adquirida. Las primeras unidades llegarán a sus dueños a partir de 2018.