Andre Calantzopoulos, CEO de la tabacalera , una de las más grandes del mundo, anunció que la empresa dejará de fabricar tradicionales y apostará por productos alternativos.
Un poco de historia
Philip Morrison lanzó la marca Marlboro como cigarrillos para mujeres. En los años 20, la publicidad se centró en lo femenino de los filtros y buscaba acercarse al mercado mayoritario. Para 1983 ya era la tabacalera más grande del mundo, pero también por esos años se hacían públicos estudios científicos que hablaban del perjuicio del tabaco. A partir de estos años inició la caída de la empresa.
A comienzos de este siglo ya habían perdido tres millonarios juicios contras personas enfermas de cáncer, según el diario La Tercera de Chile.
Nuevo rumbo
Desde hace varios años, la compañía comenzó a elaborar otros productos alternativos como los cigarrillos electrónicos y el IQOS, un cigarrillo sin humo que ya está a la venta en Japón, Suiza e Italia. En el lanzamiento mundial de este nuevo dispositivo se hizo el anuncio del fin de la fabricación de los cigarrillos tradicionales.
“Creo que llegará un momento en que tendremos la suficiente aceptación de estos productos alternativos… para empezar a plantearse, junto a los gobiernos, una eliminación gradual de los cigarros convencionales. (…) Espero que ese momento llegue pronto”, dijo Andre Calantzopoulos, CEO de la tabacalera, durante una entrevista en BBC Radio 4.
La gigantesca multinacional Marlboro señala que el IQOS permite que los fumadores reciban la misma ración de nicotina que un cigarro tradicional, pero un 90% menos de las toxinas más nocivas del tabaco. Además aseguran que IQOS tiene el mismo impacto que dejar de fumar.