El Centro Cívico de la ciudad de Córdoba fue el escenario elegido para el desarrollo de la 3° Convención del Maíz. Organizada por la Sociedad Rural de Jesús María, la Bolsa de Cereales de Córdoba y el Ministerio de Agricultura de la Provincia, la jornada concentró a especialistas de renombre y numerosos productores del centro del país.
El encargado de inaugurar el simposio fue el titular de la cartera de Agricultura, el Dr. Sergio Busso. El funcionario llamó a generar trabajo genuino, destacando el salto productivo que tuvo el maíz en la provincia. “En 23 de los 26 departamentos, se produce maíz. En ese sentido, tanto Nación como Provincia están trabajando en obras de infraestructura, tales como las rutas 19, 36 y 9 Norte”, señaló.
Por su parte, el ministro de Ciencia y Tecnología, Walter Robledo, celebró la visión público/privada promovida desde el encuentro, al mismo tiempo que propuso una alianza estratégica con el sector científico/tecnológico. “Hay que empezar a poner en valor los sub-productos residuales del maíz, mediante eficiencia y competitividad”, expresó.
Maiz es biocombustible mas proteína animal
El analista de mercados de granos, Carlos Etchepare, ofició de moderador del primer panel de la jornada. El especialista comenzó el bloque refiriéndose a las oportunidades del maíz como abastecedor de alimentos y energía. “En la actualidad, se producen 40 millones de toneladas de maíz al año. Sin embargo, hay que generar las condiciones necesarias para agregar valor en origen”, admitió.
Siguiendo esa línea de pensamiento, el presidente de Bioeléctrica y Bio4, Marcelo Otero, adujo que el maíz es un grano “que tiene muchísimo para transformar”. “Argentina es el segundo exportador de maíz en el mundo, pero el sexto productor. Esta realidad refleja la falta de innovación local”, añadió.
En otros datos, Otero manifestó que en las dos plantas que dirige, “hay 5.000 personas trabajando con el tema del etanol en la actualidad”, enfatizando en la importancia de generar “biomasa”, ya sea como combustible, electricidad o energía térmica. “Con sólo 30.000 hectáreas, se podría satisfacer el 5% de la energía en Córdoba”, ejemplificó.
En cuanto al maíz como producto proteico, el experto en reproducción animal -y miembro de SRJM-, Pablo Lozano, hizo hincapié en los beneficios de la “burlanda” para la ganadería bovina y porcina. “Más allá de que el maíz es una pieza clave para la sustentabilidad de nuestros suelos, el uso del grano en la etapa de engorde y cría es esencial”, expresó.
“Lo que se puede lograr a través de la transformación del grano en carne y en energía, es evidente. Hace falta lobby y mayor infraestructura”, coincidieron tanto Etchepare como los disertantes convocados. (CRA)