La información fue confirmada por el presidente de la Federación Argentina del Citrus, José Carbonell quien adelantó que “ya están dada las condiciones para empezar a exportar y para eso se está preparando un evento el próximo mes”.
Se estima que las exportaciones anuales llegarán a unas 20.000 toneladas por un monto de u$s50 millones.
Si bien el primer embarque es significativo, el objetivo es empezar “de a poco” cuidando no sólo el “volumen” sino principalmente la “calidad”. En un principio sólo se enviará lo comprado.
Carbonell señaló que están por llegar técnicos del Servicio de Sanidad e Inspección Animal y Vegetal de los EE.UU. (Aphis, por sus siglas en ingles) para verificar más plantas de empaques que se podrán estar sumando a las cinco que ya están autorizadas para la exportación.
Esto quiere decir que las perspectivas de crecimiento en el mercado del país del Norte será importante. El USDA estima que las exportaciones de limones de Argentina se realizarán durante el verano del hemisferio norte (abril-agosto), cuando la producción estadounidense es muy reducida.
El primer envío servirá para inaugurar una barrera inteligente de control sobre la ruta 9 (entre Tucumán y Santiago del Estero) para prevenir la enfermedad del HLB la cual tuvo un costo de $25 millones. La idea es luego desarrollarla en otras zonas del país.
El objetivo no es sólo evitar el paso de las frutas por dicho camino sino principalmente detectar el tránsito de material verde tal cual se le llama a las plantas y plantines que son los transmisores de las plagas.