En el Hotel Quórum de Córdoba se vivió un clima de esperanza, superación, compromiso y mucho espíritu de equipo. “Nos reunimos para enfrentar juntos los desafíos que nos impone la nueva agricultura”, dijo Nicolás Brandstadter, gerente de marketing de Nidera Semillas, durante la reunión que convocó a más de un centenar de actores productivos del centro del país. “Creemos que a nivel de lote todavía hay un gran potencial a desarrollar que no estamos alcanzando y queremos desafiarlos a que los logremos juntos. La idea es repasar algunos conceptos, que saquemos conclusiones y nos llevemos valor agregado para cumplir ese objetivo”, afirmó.
La jornada estuvo en línea con el enfoque de acercamiento que Nidera viene teniendo con sus clientes, apoyado en un paquete de servicios que ofrece de forma totalmente gratuita. “Los datos se han vuelto un insumo clave”, advirtió Darío Moreno, encargado de Desarrollo de Producto de Nidera para el norte del país. En ese sentido, resaltó la importancia de la extensa red de ensayos que tiene desplegada la compañía en más de 500 localidades, y que año a año arroja un gran caudal de información que es sometida a un riguroso análisis comparativo y estadístico. “Todo eso se transforma en datos de calidad y una herramienta fundamental para que junto con el productor podamos construir una mejor recomendación”, continuó.
Allí se destaca ADN (Asistente Dinámico Nidera), una gran base de datos comparativa que brinda el mejor posicionamiento y recomendación de cada material frente a determinadas variables como fecha de siembra, densidad y resultado económico. “Ya es la tercera campaña que lo estamos implementando en soja y maíz. Estamos trabajando para tenerlo pronto también en trigo y girasol”, agregó el representante de la compañía. A eso se agrega el programa Nidera Vuela, a partir del cual más del 70% de los distribuidores de la RED.IN tiene su dron para seguir paso a paso la evolución de los cultivos. Y el combo de servicios se completa este año con el “Sistema de Manejo Variable” que busca ajustar las prácticas de manejo de forma diferencial según el potencial de cada ambiente. “Es gratuito, muy sencillo de usar, e involucra al productor en la creación de la recomendación”, resumió Moreno.
“Estamos frente al paradigma de las 4E (economía, ecología, ética y energía)”, enfatizó Santiago Lorenzatti, de Okandú, durante la reunión de Nidera. “Estamos en la época de la información. Factores como tierra, capital y trabajo pierden eficiencia. El ganador es quien usa mejor la ciencia y la tecnología. El consumidor incrementa las exigencias ambientales y demanda trazabilidad de cada producto”, diagnosticó y remató: “tenemos que ser sustentables, parecer sustentables y comunicar que lo somos. La agricultura del futuro va a depender de eso”.
“La Siembra Directa es el pilar fundamental sobre el cual construimos. La segunda es la rotación de cultivos. Cuantos más cultivos, mejor”, disparó Lorenzatti al compartir su experiencia productiva sustentable.
“Implementar las Buenas Prácticas Agrícolas no sólo es necesario para cuidar el peso invertido, sino también para garantizar a la sociedad que estamos haciendo las cosas bien”, dijo Lorenzatti y presentó el caso de Monte Buey, un Municipio Verde Certificado, un proyecto concretado gracias al trabajo en equipo, al involucramiento de todos los actores, productores, aplicadores, fiscalizadores, municipio.
Más tarde, Halcón Monitoreos planteó al público un innovador esquema que combinó la actualización de contenidos en materia de plagas y enfermedades con un juego interactivo. Como en un “¿Quién quiere ser millonario?” del agro, Roberto Peralta y Roberto de Rossi, pusieron a prueba los conocimientos de los invitados.
Así, de manera lúdica, se pudieron repasar los estragos que ocasiona la Oruga del Yuyo Colorado en el cultivo de soja, que puede comer tanto hoja como grano, y qué mecanismos tiene a mano el productor para mantener a raya esta problemática. O la gravedad que representan los Trips del Poroto, que ocasionan una pérdida de rendimiento muchísimo más grave que una defoliadora. “Hay que tratar de evitar no tanto los adultos, sino las ninfas”, recomendó Peralta.
En cuanto a enfermedades, De Rossi señaló que hay mucha heterogeneidad sobre la dimensión de este problema en todo el país, con vastas regiones donde casi no existe el manejo en esta materia y otras zonas donde le dan muchísima importancia. En ese sentido, destacó que es fundamental el monitoreo y conocer con exactitud la calidad genética de cada material y su comportamiento ante enfermedades. “El mayor desafío lo representan las enfermedades de fin de ciclo, que es donde aparecen las mayores preguntas e incertidumbres para el productor”, completó.
El encuentro tuvo como cierre una charla motivacional a cargo de Rubén Magnano, el ex DT de la Selección Argentina de Básquet, quien junto a Manu Ginóbili y la Generación Dorada ganaron la medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. El entrenador repasó algunas de las claves que fueron determinantes para lograr la histórica hazaña, que gira principalmente sobre un eje central: la construcción de un equipo. “La suma de talentos no garantiza el éxito. Pero esos talentos puestos a disposición del equipo es lo que te pone cerca de tu objetivo”, remarcó.
Humildad, solidaridad, respeto, trabajo, confianza, tener una visión integrada, transmitir seguridad, saber escuchar, enfrentar las adversidades e involucrarse en los sueños para transformarlos en realidad, fueron algunos de los valores que Magnano transmitió al público, que lo escuchó con admiración.
