“En principio lo que esta ocurriendo es que se esta cumpliendo el pronostico de una muy buena cosecha estadounidense”, arrancó la charla uno de los que más sabe sobre la historia de los mercados mundiales. Y destacó que por primera vez, Estados Unidos llegará a un rendimiento promedio nacional por encima de los 35 quintales.
El país del norte subió 4 millones de toneladas la producción esperada entre el informe pasado y este último reciente. Además, Botta apuntó problemas de demanda, porque China no esta requiriendo a la velocidad que históricamente lo hizo. “Está demandando un poco más sobre Latinoamérica y no tanto sobre Estados Unidos”, evaluó el titular de Agrobrockers.
Por otro lado, citó la economía mundial entre Estados Unidos y China que tienen algunos problemas y todos avizoran el ingreso a una pequeña recesión. “Eso confluyó en un factor explosivo”, señaló.
“Tenés un stock americano que es el tercero mas alto de la historia; y un stock mundial también de los más altos de la historia, oferta de granos abundante, con su consecuente caída de precios”, ilustró.
Lo cierto es que la economía está a la espera de novedades. Para Fernando Botta, eso en el fondo tiene un dato positivo; “todos esperan que la reserva federal de EEUU baje la tasa de interés en Septiembre, y empiece un proceso de 4 a 6 bajas consecutivas, que llevaría la tasa de interés del 5,25 por debajo del 4/3.25 a 7 meses, que debilitaría al dólar y seria un impulso adicional para los precios que hoy están bastante bajos”.
¿Cómo afecta a Argentina?
En un país eminentemente agrícola esto es un problema, porque su principal producto de exportación esta perdiendo valor. Los cálculos que circulan muestran que esta baja de precios implicó una perdida aproximada de unos 10 mil millones de dólares en ingreso de divisas.
El titular de Agrobrockers analizó que, con este escenario, se va a ralentizar la recuperación económica, porque “la situación de los productores, con estos precios de los granos, es bastante difícil, partiendo de la base de que aún soportan un 35% de retenciones para la soja y la brecha cambiaria”. Botta estimó que, si esto se mantiene, para la próxima campaña el escenario será muy ajustado.
¿Y el cepo?
La discusión mas grande que se plantea por estas horas en Argentina, en materia económica, es cuando se saldrá del cepo. Todos apuestan al primer trimestre de 2025 y no antes. Fernando Botta consideró que esto dependerá fundamentalmente del ingreso de divisas por blanqueo, independientemente de lo que ocurra con la soja.
“Lo que si probablemente se demore es la baja de las retenciones y eso para el sector es un problema, porque con estabilidad macroeconómica, las retenciones son un salvavidas de plomo muy grande para el sector”, lamentó el experto.