El aporte del principal complejo agroexportador argentino a la economía argenina se diluyó debido al proceso de primarización que está experimentando en el presente año debido a un esquema impositivo desfavorable combinado con restricciones comerciales.
En los primeros tres meses del ciclo comercial 2018/19 (abril/junio) las exportaciones argentinas de poroto de soja sumaron 2,72 millones de toneladas, una cifra 124% superior a la registrada en el mismo período del año anterior.
En el segundo trimestre de 2019 los embarques de harina de soja, en cambio, registraron una suba del 24% al sumar 7,86 millones de toneladas versus 6,34 millones en el mismo período de 2018, según datos oficiales publicados por el Indec.
En lo que respecta a las exportaciones argentinas de aceite de soja en bruto, las ventas externas argentinas en abril/junio pasado fueron de 1,44 millones de toneladas (+46% que en el mismo trimestre de 2018), mientras que las colocaciones de biodiesel (producto elaborado en un 100% con aceite de soja) cayeron en un 10% al sumar 431.520 toneladas versus 479.195 toneladas en el segundo trimestre de 2018.
El informe del Indec de Intercambio Comercial Argentino (ICA) correspondiente al primer semestre de 2019 muestra que el aporte neto del complejo agroexportador sojero en el primer semestre de 2019 fue de 9410 millones de dólares, apenas 119 M/u$s superior al registrado en enero-junio de 2018.
A comienzos de septiembre del año pasado, por medio del decreto 793/18, el gobierno argentino estableció para el poroto, aceite y harina de soja un derecho de exportación con una alícuota fija del 18,0%, a la cual se adicionó un factor variable del 4 pesos por cada dólar FOB. En cuanto al biodiesel, a la alícuota fija del 15,0% también se le adicionó el factor móvil del 4×1. Sin embargo, a la harina de trigo y de maíz, sémola, almidón, malta, pellets de girasol, aceite de maní, de maíz y de girasol –entre otros productos agroindustriales– se les aplicó una retención móvil de 3,0 pesos por dólar FOB.
EE.UU., principal mercado argentino del biodiesel, aplicó en 2018 un bloqueo comercial –ratificado recientemente– que promovió un descenso significativo de los embarques del biocombustible.
Fuente: Valor Soja