La Bolsa de Comercio de Rosario afirmó que el 2019 fue “aceptable” para el campo. Según el balance de la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos de la BCR, en lo estricamente climático y productivo, el cierre del año encuentra al sector en una posición muy diferente a la del período anterior, muy perjudicado por la sequía.
Según la BCR, la campaña 2018/2019 alcanzó una producción total de granos de 142 Mt siendo un 46% mayor a lo producido en la campaña anterior (97,6 Mt). A su vez, si consideramos los cultivos más importantes del complejo agroindustrial exportador (soja, maíz y trigo) el valor alcanzado fue de 127 Mt a diferencia de los magros 84,5 Mt del ciclo 2017/18.
Además, los aumentos en los volúmenes de producción en el complejo agroexportador argentino repercutieron positivamente en nuestras exportaciones en término de valor. Según datos publicados por el INDEC, las exportaciones en los últimos once meses de 2019 aumentaron 5,8% (3.257 millones de dólares) respecto al mismo período de 2018, debido principalmente al incremento en cantidades de 13,3%, ya que los precios cayeron 6,7%.
Aspectos negativos
Entre los hechos que afectaron el negocio granario, se cuentan los desequilibrios macroeconómicos que generaron tensiones comerciales y de financiamiento dentro del sector y la bajante del Río Paraná, donde el conjunto de terminales portuarias ubicadas en el “Up-River Paraná” comprendido entre Puerto General San Martín y Villa Constitución, sufrieron los bajos niveles del Río dificultando, en algunos momentos, la carga de buques con destino de exportación.
Además, la supresión del diferencial arancelario que se arrastra desde septiembre de 2018 sigue afectando a las exportaciones del complejo soja, ya que desalienta el procesamiento de soja a nivel local y no permite aumentar las exportaciones con mayor valor agregado al resto del mundo.
Más presión impositiva sobre el campo
De acuerdo con la BCR, además del aumento de los derechos de exportación, otros temas que generan preocupación son las modificaciones en el Impuesto a los Bienes Personales, la creciente presión impositiva en la provincias, las todavía elevadas tasas de interés locales para obtener financiamiento, los costos de flete para las producciones del norte argentino y la falta de obras de infraestructura viales y ferroviarias que imposibilitan disminuir los persistentes altos costos logísticos; entre otros.
REDACCIÓN ON24
