Los primeros lotes cosechados en los alrededores de Las Varillas alcanzaron un promedio de 120 qq/ha. Se estima que el piso estará en 100 qq/ha y los máximos llegarían a 145 qq/ha. La cosecha está muy trabada por el ambiente de alta humedad que dificulta bajar el contenido de agua en el grano y va muy de a poco.
De acuerdo al último informe del GEA de la Bolsa de Comercio de Rosario, en Marcos Juárez se lleva un avance del 20% con promedios entre 85 a 90 qq/ha. En Pergamino, los lotes tardíos están siendo cosechados con un 10 a 20 % más de rindes que los tempranos. En cambio en San Antonio de Areco los rindes son muy variables. Fueron muy afectados por la sequía: hay lotes de 70 a 80 qq/ha, como otros de 40 a 50 qq/ha. En el noroeste bonaerense, General Pinto cosechó la mitad de sus maíces tardíos con un rinde medio de 70 qq/ha. En el centro sur de Santa Fe, como en Carlos Pellegrini, se cosecharon los lotes que habían empezado a caerse y quebrarse la caña. Los rindes estuvieron cercanos a los 100 qq/ha. En Soldini los rindes medios marcaron 105 qq/ha y en Acebal, 112 qq/ha. También hay rindes de 15 a 70 qq/ha hacia el centro este, como en López y Gálvez.
Precampaña 2021/22: el cierre de los alquileres se adelantó con leves alzas en zonas alejadas de Rosario
“Están muy peleados. Los nuevos contratos subieron un poco mientras que los contratos de hace varios años lograron mantener el mismo precio”, detallan los agrónomos de San Antonio de Areco. La demanda de lotes y la firmeza de las cotizaciones de los granos levantaron las temperaturas de las negociaciones y la intención de reajustes de los valores de los alquileres en algunas zonas, especialmente en las más alejadas del puerto. En Marcos Juárez los profesionales detectan que los valores están similares o un poco más elevados que el año anterior. En General Pinto y el Trébol se han adelantado a cerrar los alquileres aunque sin demasiados cambios en los valores respecto del año pasado. En Cañada Rosquín, Carlos Pellegrini, Cañada de Gómez y Bigand los contratos de alquiler mantuvieron los mismos valores respecto a los del año pasado. “Hay una alta demanda, por lo que puede generar alguna suba”, advierten los técnicos de Cañada Rosquín. Allí, agregan: “pero también los números se están complicando con las bajas de precios y el aumento de los costos como fertilizantes y combustibles”.