Las pérdidas en trigo ascienden a un 30% en el noreste bonaerense

En esta región todavía sigue siendo muy complicado acceder a los lotes. En tanto en el resto de la región, las pérdidas se estiman en el orden del 5% sin embargo los suelos siguen muy saturados a dos semanas del evento. El cereal ingresa de a poco a la encañazón pero la generalidad de los cuadros están en macollaje y se califican como buenos y muy buenos. Las enfermedades están limitadas, se ven con baja severidad y no requieren control. Por su parte, en la cebada se necesita controlar cuanto antes la “mancha en red”. Aún es apresurado elaborar un diagnóstico de impactos de rindes en los cereales pero se puede inferir que habría una menor cantidad de nitrógeno disponible para su crecimiento si no se realiza una refertilización. Los cuadros con pendientes son los que presentan la mejor condición hídrica pero perdieron parte de la capa superficial del suelo con el paso del agua. La estabilidad climática está posibilitando el ingreso a los lotes sembrados pero aún se sigue circulando por caminos estropeados. Los rastrojos forman cúmulos en la periferia de los lotes y se pronunciaron las huellas de las corridas de agua.      

En la medida en que tienen condiciones de piso en los cuadros, se reactivaran las aplicaciones de barbechos para la gruesa. Los lotes se observan enmalezados y las perspectivas climáticas a corto plazo son favorables para su control. Se esperan siete días de tiempo estable, con un fuerte ascenso de las temperaturas. (GEA)

Comentarios