Hasta hace poco, se pensaba subir el área triguera en la zona núcleo entre un 15 y un 20%. Pasa el tiempo y la siembra sigue muy trabada por falta de piso. El avance es del 35% y la intención empieza a tambalear.
Lluvias y tormentas de variada intensidad, abundante caída de agua, ráfagas muy importantes de viento y granizo en forma dispersa continuaron durante toda la jornada del jueves. El paso de la tormenta dejaría registros muy importantes en la región. De esta manera, lotes con suelos saturados y profundas huellas por el paso de las cosechadoras, ante la imperiosa necesidad de terminar de levantar la soja y el maíz, y caminos intransitables, seguirán formando el complejo panorama de este mes de junio.
El ultimo informe del GEA indica que la situación más crítica se encuentra en el norte de la provincia de Buenos Aires. En esta zona sólo se pudo sembrar un 10% del trigo intencionado y nuevas precipitaciones seguirán frenando las labores. Se pasó la fecha de siembra óptima de los ciclos largos y sigue el mal clima. Esto preocupa y está reajustando los planes de siembra y el trigo empieza a descartarse de muchos lotes.
En contraste, en el centro y sur de Santa Fe y el este cordobés exhibieron una interesante fluidez en la siembra. Se alcanzó casi la mitad de la superficie intencionada; allí sólo los lotes bajos tienen riesgo de quedar fuera de la intencionalidad de siembra.