La paleta de semillas pinta más variedades para la próxima campaña

La sequía es una oportunidad para seguir trabajando en el mejoramiento genético y la incorporación de cultivares de mejor performance. Stine apunta a nuevos maíces y sojas para más regiones del país.

En los bares y reuniones a las que acuden los productores del interior del país, el tema que domina todas las conversaciones es el mismo: la sequía.

Según la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, la superficie bajo falta de agua severa se incrementó en 6,5 millones de hectáreas durante enero y hay 8 millones de hectáreas de cultivos en riesgo.

Vale recordar que se trata del tercer año consecutivo con presencia del fenómeno La Niña, y esta continuidad de las sequías es una invitación a trabajar en el mejoramiento genético, para hallar más variedades que permitan sobrellevar condiciones de estrés como las actuales, o las provocadas también por otros factores climáticos o biológicos.

En ese camino está Stine, que se viene afianzando en el mercado argentino tras su desembarco en Argentina en 2018 con tecnología de punta en maíz y en el 2020 con su propia tecnología en soja, Enlist E3 y Conkesta Enlist E3.

“Le ofrecemos al productor algo diferente. En cuanto a maíz, pusimos foco en híbridos cortos y petisos, con ciclos más precoces y de porte más pequeño que la competencia. Llevó mucho trabajo empezar a posicionarlos y hoy en día ya empezamos a ser conocidos por el productor en esos productos”, remarcó Juan Rosasco, gerente de Marketing de Stine. “Venimos para quedarnos en el mercado y para ser líderes en ambos productos”, completó.

En cuanto a soja, la empresa desembarcó con un pofilio 100% con la tecnología Enlist, que son copropietarios con Corteva. Comenzaron con grupos 2.5 hasta 4.8 y este año sacaron dos productos nuevos: 4.5 y 4.7. Para la campaña que viene, comentó que están con mucha expectativa con dos productos nuevos, como es la variedad 4.6, la cual ya tiene un apodo muy particular, y una de grupo 3.3.

A su vez, el semillero puso en marcha el proyecto para poder sacar grupos más largos destinados a las regiones del norte del país (NOA-NEA) y Entre Ríos, a partir de un trabajo conjunto con el programa genético de Brasil y Estados Unidos.

“Este año ya estamos testeando el ultimo estadio pre comercial, sojas de grupos desde 5.1, 5. 3 y 5.5 y ya el otro año ya esperamos empezar a testear el desarrollo producto del Grupo 6 en adelante, ya logradas 100% con “sangre Argentina”, lograda por el equipo de R&D local”, explicó.

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