La humedad condiciona el avance del trigo

En contraste, el norte bonaerense y sur santafesino están atrasados en las labores trigueras por los excesos hídricos. Empezaron a observarse los primeros rindes de los maíces sembrados en diciembre, ubicándose en 84 qq/ha.

Las anheladas bajas temperaturas finalmente llegaron a los campos y beneficiaron el control de malezas estivales y cultivos guachos. Las últimas 24 hs marcaron las temperaturas más frías del año. En el mapa 1 se observa la cantidad de horas inferiores a los 0 °C. En el mapa 2 se observa que las temperaturas mínimas llegaron a los -4°C. Los barbechos que restan por realizar posiblemente se planifiquen al tener mejores condiciones para la aplicación.

En tanto, el avance de la siembra de trigo presenta marcadas diferencias según la humedad superficial del suelo. Los lotes cordobeses y también del centro sur de Santa Fe fueron pioneros en el avance de las labores de siembra pero actualmente la humedad superficial está comenzando a escasear. Hace un mes y medio de la última lluvia relevante y se necesita humedad para culminar las tareas. Es factible que algunos lotes puedan quedar fuera de los planes de siembra. Es importante resaltar que hay adecuadas reservas de agua en profundidad para el desarrollo posterior del cultivo. Hacia el sur de Santa Fe y, principalmente, el norte de Buenos Aires la siembra presenta un notable retraso por los excesos hídricos. A este escenario de condiciones climáticas inicialmente desfavorables se suman los factores económicos y comerciales, de gran peso a la hora de producir trigo. La intención de siembra de la región núcleo arroja una caída de superficie triguera del 30%. La cebada se mantendría o aumentaría levemente su participación en las rotaciones. (GEA)

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