Inversiones rentables en el mundo agrícola

Si hablamos de actividades económicas importantes en nuestro país, no podemos dejar de mencionar al mundo agropecuario.

Son cada vez más las personas qué eligen incursionar en trabajos en torno al campo y conocer sobre métodos de riego, maquinarias y cultivos que auguran buena rentabilidad para el próximo tiempo.

Su maquinaria

En los últimos años, las máquinas agrícolas se han vuelto una herramienta fundamental para los productores. Agilizan los tiempos de trabajo y ayudan a reducir las pérdidas en la producción. Si bien son diversas las máquinas que pueden llegar a utilizarse, una de las más elegidas es el tractor.

Además de ofrecer distintas prestaciones, este vehículo es utilizado por otras maquinarias qué necesitan de él para funcionar, como por ejemplo las sembradoras.

Encontrar tractores en venta en el mercado puede resultar muy fácil si se busca en el lugar indicado. Para eso, Agroads ofrece una amplia gama de diversos valores y características que se adaptan a las necesidades de cultivo y financieras que presentan sus clientes.

Para comenzar a invertir en este mundo, no es necesario contar con maquinaria nueva, de hecho, es probable qué comiences invirtiendo en herramientas de trabajo que ya tengan un uso previo.

Inclinarse por tractores usados en venta puede ser una buena alternativa que permita reducir el costo inicial. Es amplia la variedad que suele ofrecerse aunque también podrás encontrar más tractores usados en venta aquí

Cualquiera sea la opción que escojas, invertir en una tractor en la etapa inicial será, sin dudas, un acierto.

4 cultivos novedosos

De todas maneras, antes de definir las maquinarias en las que debes invertir, es necesario escoger el tipo de cultivo a desarrollar.

Si bien la agricultura no es una ciencia exacta qué asegure el 100% de la rentabilidad, existen ciertos cultivos que, con los cuidados indicados, pueden ofrecer muy buenos resultados.

En las actualidad, los más rentables en el territorio Argentino pueden ser:

Olivo

El cultivo de olivo puede resultar una buena inversión. En los últimos años sus métodos se han ido perfeccionando para optimizar al máximo su producción.

Actualmente se trata de un cultivo rentable debido a la mecanización de sus procedimientos y a la disminución de los marcos de plantación que permiten obtener más pies por hectáreas.

El conjunto de todas estas medidas ayudan a elevar la producción con un costo menor.

Almendro

En Argentina el consumo de almendro es 10 veces más grande en relación a la producción nacional, es decir, qué gran parte del almendro qué se consume es importado. Esto indica qué se trata de un mercado poco explotado en nuestro país que a su vez cuenta con un público asegurado.

Para un óptimo crecimiento, este tipo de cultivo necesita de un clima seco y cálido, con mucha exposición al sol. No es vulnerable a la falta de agua pero sí a las heladas.

Para obtener resultados a un corto plazo se recomienda optar por plantaciones de almendro en semi intensivo o superintensivo.

Pistacho

El pistacho puede llegar a requerir de una inversión inicial elevada, sin embargo, su fuerte demanda tanto nacional como internacional no llega a ser cubierta por la oferta que existe actualmente a nivel mundial, por lo que sus valores en el mercado se mantienen o aumentan pero nunca disminuyen.

Sus beneficios comienzan a obtenerse, generalmente, entre el segundo y tercer año. Sin embargo sus costos de producción suelen ser reducidos, dado que no necesita un exhaustivo mantenimiento.

Al igual que el Olivo y el Almendro, resiste climas cálidos y no requiere de grandes cantidades de agua.

Trufas negras

La trufa negra es un hongo que crece bajo tierra a unos 10 o 15 cm de profundidad. Resiste temperaturas extremas y climas húmedos pero puede volverse vulnerable en su período de crecimiento, por lo qué la mala regulación del riego (ya sea por exceso o escasez de agua) puede resultar fatal.

Si bien existen 13 tipos de trufas distintos, en Argentina se ha impulsado la Trufa Negra del Perigord.

Este tipo de cultivo, es considerado el oro negro de la gastronomía y se utiliza en mayor medida para aromatizar todo tipo de platos. Actualmente es muy requerido en el viejo continente y puede cotizar hasta u$s 2.000 el kilo.

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