Los profesionales del grupo Cencerro apuntaron que, para empezar hay que recordar que los machos pueden ser vendidos en cualquier momento del proceso o continuar para pasar a la etapa de terminación para su posterior faena. Para las hembras, en su caso, el destino puede ser faena o reposición para madre.
Es una unidad de negocio donde hay que estar muy finos con los números. Cuando un campo realiza un servicio de 15 meses tiene tiempo desde que se desteta en los meses de febrero/marzo hasta septiembre/octubre del mismo año para que los animales lleguen a un peso acorde que les permita entrar en servicio.
Es un periodo clave para obtener la mayor cantidad de kilos posibles.
Si se tiene un problema de parásitos, no se puede llegar a la ganancia de peso vivo que se debería o se preveía. El aspecto sanitario es más determinante de lo que parece. Son muchos los productores que pierden dinero por contar con animales en malas condiciones y no llevar un control estricto de la sanidad.
En los últimos años se ha visto una resistencia de los parásitos a la ivermectina y eso ha tenido influencia en los números de los productores. La mayoría comenzó a ser consciente de esta situación cuando se comenzaron a ver pérdidas importantes.
Recordemos que estamos entrando en época de aplicación de antiparasitarios para reforzar la protección ante enfermedades. La salida del otoño y la llegada del invierno es un momento clave para tomar precauciones.
La intención de este análisis es cuantificar detalladamente ese impacto económico que anteriormente en las empresas agropecuarias era difícil de medir. Con esto el productor tiene a disposición un resultado que le permite tomar decisiones a futuro con facilidad, algo que es complejo en el campo y sobre todo en este tipo de actividades.
