Fue esta mañana en Roma, Italia, en el marco de una reunión de la Junta Ejecutiva con dictamen de unanimidad. El “PROCANOR” fue elaborado por la UCAR junto con los gobiernos provinciales del norte grande argentino (NEA y NOA) con el objetivo de fortalecer el arraigo rural de los pequeños productores.
La Junta Ejecutiva número 116 del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) aprobó hoy la financiación del PROCANOR (Programa de Inserción Económica de los Productos familiares del Norte), elaborado por la Unidad para el Cambio Rural (UCAR), dependiente del Ministerio de Agroindustria, en estrecha colaboración con varios gobiernos provinciales, entre ellos Salta, Tucumán, Chaco y Misiones. El mismo está destinado a promover el desarrollo de cadenas de valor dinámicas y emergentes, cuya producción primaria se concentra en las provincias del norte argentino y en las que existe una alta proporción de pequeños productores.
El monto total del Programa asciende a USD 35.973.000, de los cuales el 32% corresponde a aporte local y el resto, al financiamiento del FIDA (el 67%, con préstamo, y el 1%, con una donación). El período de ejecución del programa es de 5 años.
La formulación del Programa también ha tenido en cuenta las oportunidades de construir alianzas entre el sector privado agroindustrial y comercial y las organizaciones de productores familiares que existen en Argentina, apoyando el desarrollo de cadenas de valor. Al definir el eje en los pequeños agricultores familiares desde el enfoque de cadenas de valor, el Programa se diferencia de otros realizados anteriormente en diversos aspectos, entre los que se encuentran: i) la priorización de la intervención sobre algunas cadenas donde existen mejores oportunidades de inserción; ii) el tipo de inversiones, ya que se toman en cuenta las acciones sistémicas requeridas para el mejor posicionamiento en las cadenas de valor de la pequeña agricultura familiar; y, c) desde el diseño del Programa, se estipula que las decisiones sobre aquellas inversiones sean tomadas en el marco de espacios participativos compartidos. La equidad de acceso en términos de género así como el foco en los jóvenes varonesy mujeres del medio rural son prioritarios para la estrategia de ejecución.