En agosto la faena de hacienda vacuna ascendió a 1,23 millones de cabezas. Corregido por el número de días laborables, el nivel de actividad de la industria mostró un repunte mensual e interanual importante (+6,3% y +3,2%, respectivamente), ubicándose como el 7º mejor agosto de los últimos cuarenta y tres años.
La participación de las hembras en la faena total se ubicó en el límite inferior del intervalo que resulta consistente con el sostenimiento de las existencias vacunas (43,4%), un guarismo levemente inferior al registrado en agosto del año pasado.
En los primeros ocho meses del año se faenó un total de 8,83 millones de cabezas de hacienda vacuna, es decir 3,1% más que en enero-agosto de 2021 (+264,1 mil cabezas). Con el repunte observado en agosto, el nivel de actividad de enero-agosto de 2022 también recuperó posiciones, llegando a ocupar la 17º entre los últimos cuarenta y tres años. Y comparado con el promedio del mismo período de 1980-2021, también resultó 2,3% mayor.
La producción de carne vacuna totalizó 289 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h) en agosto del corriente año. Al corregirla por el número de días laborables, en comparación con la producción de julio se observó una suba de 6,1%. En tanto, entre agosto de 2021 y agosto de 2022 la producción subió 3,8%, mayormente traccionada por el crecimiento de la faena y en menor medida por la suba del peso promedio en gancho.
En enero-agosto de 2022 se produjeron 2,049 millones de tn r/c/h de carne vacuna, es decir 4,5% más que un año atrás. En tanto, el peso promedio en gancho se ubicó en 232 kilos por cabeza y se ubicó 1,4% por encima del promedio registrado en enero-agosto de 2021.
En materia de exportaciones, estimamos que en enero-agosto del corriente año se certificaron 587,0 mil tn r/c/h de carne vacuna, es decir 9,4% más que en los primeros ocho meses de 2021 (+50,3 mil tn r/c/h). Por lo tanto, la absorción interna habría ascendido a 1,462 millones de tn r/c/h de carne vacuna, volumen que resultaría 2,6% superior al registrado el año pasado (+37,4 mil tn r/c/h).
En materia de consumo por habitante, en agosto de 2022 el promedio móvil de doce meses se ubicó en 47,0 kg/año. En la comparación interanual fue 0,4% menor (-0,2 kg/hab/año) y, al mismo tiempo, resultó 7,6% inferior al número de agosto de 2019.
En agosto los precios de los principales cortes vacunos experimentaron muy leves aumentos. Si bien ya no hubo bajas nominales como había ocurrido en julio, se mantuvieron lejos del comportamiento del nivel general del Índice de Precios al Consumidor del GBA elaborado por el INDEC.
El nivel general del IPC-GBA subió 7,0% mensual en agosto y, de esta forma, quedó ubicado 79,1% por encima del nivel de agosto de 2021. Tal como ya lo señalamos en Informes previos, la tasa de variación anual del IPC-GBA fue la más alta de los últimos treinta años.
El asado y la carne picada común registraron subas de 0,3% mensual, que en el caso de la paleta fue de 0,5% y en el de la nalga fue de 0,8%. Sólo el cuadril mostró un alza superior (1,7%). En tanto, las hamburguesas congeladas siguieron transitando por el carril rápido, con un aumento de 10,4% mensual en agosto. Y en el precio del pollo tuvo un incremento de 3,5% mensual.
Al comparar los valores promedio de agosto de 2022 con los de agosto del año pasado, todos los cortes cárnicos relevados continuaron aumentando a menor ritmo que el nivel general del IPC. El precio del kilo de asado subió 63,2%, el de la carne picada aumentó 68,1%, el de la paleta, 60,3%, el del cuadril, 62,0%, y el de la nalga, 61,4%. En cambio, el precio de la caja de hamburguesas congeladas superó ampliamente al nivel general del IPC, ya que registró un aumento de 93,3% en los últimos doce meses. Por su parte, el precio del pollo también mostró un alza superior al de los cortes cárnicos e incluso mayor al del nivel general del IPC, llegando a 91,5% anual.
Finalmente, entre febrero de 2020, que fue el último mes completo precuarentena, y agosto de 2022, mientras el nivel general del IPC subió 3,06 veces, en promedio los cortes vacunos medidos por el INDEC subieron 3,4 veces. El precio de la paleta fue el que más aumentó (+250,4%; 4,3% equivalente mensual), seguido por el de la nalga (+244,5%), el del asado (+240,7%) y el del cuadril (239,8%). En tanto, el precio de la carne picada común registró un aumento de 232,9% entre los meses considerados. Por su parte, el valor de la caja de hamburguesas congeladas todavía acumuló un alza inferior (+191,1%; 3,6% equivalente mensual), a pesar de la aceleración que mostró en los últimos seis meses. Y en el caso del pollo entero, el precio promedio subió 250,7% en dieciocho meses (4,3% eq. mensual).
Fuente: CICCRA
