“El título permite subastar y mediar en negocios inmobiliarios del agro”

Lo afirmó el director de la carrera de Martillero y Corredor Público Rural, Oscar Santanatoglia.

La carrera de Martillero y Corredor Público Rural es una tecnicatura nómade: desde que se implementó en el 2009, año a año se va dictando en distintas ciudades de la provincia de Buenos Aires, como Daireaux, Mercedes y actualmente Saladillo. Es una carrera universitaria corta y gratuita que ofrece la Facultad de Agronomía de la UBA fuera de su sede en la Capital Federal.

“Desde la FAUBA hace más de 15 años que estamos en distintos municipios de la provincia de Buenos Aires. Es muy importante que haya una carrera de la FAUBA en el medio, darle visibilidad a la Facultad. Tenemos una gran demanda en las distintas regiones”, expresó el Ing. Agr. Oscar Santanatoglia, director de la tecnicatura.

Y explicó: “El título de Martillero y Corredor Público Rural le permite al egresado desempeñarse en subastas públicas rurales, así como en la mediación de negocios inmobiliarios relacionados con el agro. El egresado tiene la posibilidad de estar habilitado a nivel nacional para hacer remates tanto urbanos, periurbanos, como todas las actividades rurales”.

Ésta es una de las grandes ventajas que posee la tecnicatura de FAUBA, respecto a otras carreras de martilleros y corredores públicos: al ser rural también tiene una visión integrada de todas las actividades que se relacionan con el agro, ya sea en la compraventa de inmuebles rurales como de maquinaria agrícola y animales. Además, no sólo pueden actuar en el área como productores independientes, sino que también pueden estar asociados a empresas agropecuarias o escribanías.

“Hoy en día se ha abierto una nueva visión de lo que son remates de bienes rurales. Actualmente con el Turismo Rural se ha generado otra visión de la capacidad de gestión de campos que antes no tenían un gran desarrollo para la productividad. De este modo, los profesionales egresados de esta carrera tienen esta visión integrada de la valoración de campos que no son productivos, pero sí son activos dentro de la actividad turística”, comentó el director.

 

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