Las fábricas ofrecieron $ 4.000/ton con descarga, igual precio que la exportación en Arroyo Seco en condiciones Cámara. En esta última condición había margen de mejora hasta $ 4.050/ton. La disposición a vender a estos precios era muy limitada. Por la oleaginosa con entrega en abril o mayo las referencias comenzaban en u$s 27/ton para Arroyo Seco en abril o mayo.
Los futuros de soja fábrica con entrega en julio de Rofex ajustaron a u$s 299/ton, en baja u$s 2,5/ton respecto del ajuste de ayer.
En el mercado de Chicago los futuros de soja operaron en baja, afectados por la mejora en la condición de cultivos en Estados Unidos y ante perspectivas de mayor humedad en algunas regiones del medio oeste norteamericano.
Trigo
Operó con algunos vaivenes. El segmento disponible se negoció a $ 2.450/ton condiciones cámara sobre Puerto Gral. San Martín, con posibilidad de llegar a $ 2.500/ton. Para la descarga en julio los precios llegaron a u$s 180/ton Cámara, cayendo a u$s 170/ton en posiciones de entrega a partir de diciembre. El volumen negociado fue bajo.
En Rofex no se realizaron operaciones con trigo.
En Chicago los futuros de trigo cotizaron nuevamente en baja, afectados por la amplia oferta global y el rápido avance de la cosecha en Estados Unidos. La firmeza del dólar activó ventas entre los fondos especulativos.
Maiz
La exportación en Arroyo Seco y Gral. Lagos pagó $ 3.000/ton por maíz con entrega hasta el jueves, igual precio que en Puerto Gral. San Martín hasta el 21/06. En este mismo punto de entrega los valores se ubicaron en u$s 188/ton para octubre y noviembre. En cuanto al cereal de la próxima campaña, las referencias comenzaban en u$s 178/ton para los meses de febrero y marzo, con posibilidad de llegar a u$s 180/ton en casos puntuales. Los precios caían luego a u$s 175/ton en marzo o abril, u$s 173/ton en mayo o u$s 170/ton en junio y julio. Se intercambiaron más de 50.000 toneladas.
En Rofex no se realizaron negocios con maíz.
En el mercado de Chicago los futuros de maíz operaron nuevamente en alza, sostenidos por posibles ajustes a la baja en la previsión de área de siembra en Estados Unidos y ante la firme demanda externa. Las reservas de humedad en el medio oeste norteamericano se están consumiendo a paso acelerado, motivando coberturas.