La agricultura de labranza cero marcó rumbos a nivel mundial y representó un giro revolucionario para la agricultura de nuestro país. Tal como ocurre todos los años, la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) estará presente en Expoagro 2016.
“El año de Aapresid comienza con Expoagro, porque desde allí lanzamos nuestro plan de trabajo anual y además hacemos en ese ámbito la reunión de comisión directiva del mes. También aprovechamos la muestra para hacer reuniones con todos nuestros aliados estratégicos, con miras a fortalecer el trabajo que después llevaremos adelante durante todo el año”, explica María Beatriz “Pilu” Giraudo, presidenta de la entidad.
Para la titular de Aapresid, la agricultura argentina vive un punto de inflexión hacia la revalorización de la producción sustentable a nivel ambiental y productivo. Opina: “Después de 12 años de políticas desacertadas, llegó el cambio que veníamos pidiendo desde hace tanto tiempo. Tenemos un enorme desafío por delante, sobre todo respaldados en nuestra misión, que es producir alimentos, fibra y energía cada vez en mayor cantidad y con mejor calidad, pero cuidando los recursos naturales.”
Sin embargo, “Pilu” advierte un retraso tecnológico en la producción, que aun debe revertirse. “Realmente estábamos con tremendas restricciones para poder llevar adelante estas condiciones de sustentabilidad productiva y no tenía ningún sentido desarrollar nuevas tecnologías sin políticas públicas que acompañaran, para poder aplicarlas. Hoy estamos con ese cambio y nos planteamos impulsar más que nunca la recuperación del paquete de buenas prácticas agrícolas (BPA), que arranca con la siembra directa, pero que después incluyen las buenas prácticas que son condición sine qua non para alcanzar esa producción sustentable”, agrega.
“Al no poder aplicar el paquete completo de buenas prácticas –continúa la dirigente-, estamos produciendo muy, muy por debajo de la media de lo que podemos hacer. En estos años, la creatividad permitió a muchos productores encontrarle la vuelta y lograr una producción sustentable. De hecho, estos productores son los que siguieron demostrando que hasta se puede duplicar la producción por hectárea o por año en las distintas zonas, cuando se recurre a este paquete de BPA. Esto es clave y evidencia que el trabajo de divulgación y de extensión tiene que ser máximo, y en esa línea trabajaremos también este año en Expoagro.”
Realmente, los últimos años pusieron de máxima evidencia qué pasa cuando no se aplican las prácticas que tienen como objetivo la sustentabilidad. Postula la productora: “En el país está tan instalada la siembra directa como herramienta, que parece que nos olvidamos que si no la acompañamos de un adecuado manejo sostenido en el tiempo, realmente la caída es estrepitosa.”
Esos manejos incluyen una adecuada rotación de cultivos, no sólo en diversidad sino también en intensidad, según la zona agroecológica, con la correcta aplicación de nutrientes que requiere esa rotación, manejo integrado y de enfermedades, y responsabilidad en el uso de fitosanitarios. “De hecho, hoy están culpando en un montón de ámbitos a la siembra directa de ser causante de inundaciones, del endurecimiento de los suelos, de la compactación o del vertiginoso problema de las malezas resistentes, y no nos acordamos que lamentablemente en los últimos años, más del 60 por ciento de la superficie cultivada estaba ocupada por soja, un monocultivo que consume la mitad de agua de lo que llueve en la mayoría de las zonas en las que se cultiva”, critica la empresaria.
En cuanto a la necesidad de avanzar con la agricultura de Precisión, un tema central en Expoagro 2016 a partir de las Dinámicas de Precisión que se realizarán en la feria del kilómetro 214 de la Ruta Nacional 9, la presidenta de Aapresid considera que es uno de los grandes imperativos para el agro argentino en el futuro inmediato. “Hace cinco o seis años, el uso de tecnología avanzada en el ámbito agropecuario superaba el 75 -80 por ciento. Pero advertimos que desde entonces en forma paulatina decayó, y hemos disminuido tremendamente su uso”, advierte.
“Hoy en día, con un gobierno que apoya e impulsa la agroindustria, la pelota está de nuestro lado y tenemos el enorme desafío de demostrar que es posible la percepción que hace tanto tiempo tenemos, de que podemos ser colaboradores estratégicos para el desarrollo de todo el país. Para eso, la adopción de tecnología de avanzada es fundamental. Las tecnologías son caras. Esperemos haber aprendido la lección de no usar tecnologías masificadas, de usar un abanico de herramientas, cada una para su sitio específico. Ahí la agricultura de precisión tiene un rol fundamental para acompañarnos en este nuevo avance. Y Expoagro cumple con el rol fundamental de ponernos en contacto con los últimos adelantos de la tecnología agrícola”, concluye “Pilu” Giraudo.