El Congreso de Malezas 2021, organizado por la Asociación Argentina de Ciencia de las Malezas, que se desarrolló en forma virtual, tuvo como objetivo “reflexionar” respecto del problema de la mayor presencia y de poblaciones de malezas de difícil control, en “la evolución de biotipos resistentes, la reducción de la biodiversidad y la contaminación ambiental”, tal como planteó el presidente de Asacim, Julio Scursoni, en la apertura.
Scursoni describió que “la tasa de evolución de la resistencia entre 2010 y 2030 fue de 4 nuevos registros por año con predominancia del glifosato” y llamó la atención respecto al hecho de que “han crecido los reclamos de la sociedad en relación a los efectos del uso de agroquímicos sobre el ambiente y la salud”.
También resaltó que el problema de la resistencia a los herbicidas ha incrementado los costos de los cultivos en porcentajes que oscilan entre “25 y más de 100% según cultivos y zonas”.
Para Scursoni “queda claro que es necesario y apremiante el diseño de sistemas de producción sustentables. El principal insumo para lograrlo es el conocimiento. El objetivo general del Congreso es crear un ámbito favorable para la difusión e intercambio de conocimiento científico y tecnológico de utilidad para la actividad productiva”.
“Debemos comprometernos a producir más en un ambiente sano y persistente en el tiempo, considerando prioritaria la producción de alimento en calidad y cantidad suficiente y al alcance de toda la sociedad”, concluyó.